El mundo nació con la predisposición de escuchar historias y las marcas reconocieron ese valor convirtiéndola en una imparable fórmula de venta asentada sobre una estrategia y una ocasión para explotarla. Así, lo que hoy conocemos como storytelling, encontró su auge en el Día de la Madre, logrando una alta efectividad para las empresas que lo aplican. Sobre los pilares de una narrativa bien contada se han erigido grandes campañas que apelan por las emociones para conectar con sus consumidores a través de valores, ideas y conceptos que finalmente llevan a una exitosa conversión publicitaria. Continuar Continuar