Por Marcel Garreaud
Si hay algo que distingue a los peruanos es su emprendedurismo y fortaleza, solo así se explica que a la fecha haya más de dos millones de empresas en el país compitiendo por ofrecer sus productos y servicios a los más de 30 millones de personas que habitan en Perú. Tales cifras se traducen en una guerra que libran marcas de todo tipo y tamaño en pos de ganarse un espacio en el mercado peruano.
En esa lucha diaria por posicionarse, la publicidad es una de las herramientas más elegidas y a su vez rechazada por las empresas a la hora de ejecutar su marketing, pero lo que no se puede negar es que una buena campaña publicitaria es capaz de elevar la recordación de una marca en no menos del 20 por ciento en el momento crucial de la compra. Y de esto han tomado nota las empresas medianas y emergentes que pugnan por tomar su cuota del mercado, muchas veces rompiendo el statu quo.
De manera creativa, concentrada en nichos y con historias poderosas estas marcas no solo han sido emprendedoras en su trabajo sino al promocionarse, recurriendo a cuanto espacio les sea posible para hacer llegar su mensaje y propuesta de valor. Ahora, muchas de ellas, están apostando por intensificar sus campañas con nuevos contenidos e incluso un mayor interés en poner pauta en medios.
Para esto la coyuntura ha sido determinante. En el 2018, la inversión publicitaria habría tenido una caída de -15%, pese a que se esperaba una recuperación. Tal escenario se produjo debido al clima de incertidumbre política-económica que atravesó el país, generando una desaceleración en el consumo y de paso en la inversión efectuada por las empresas en publicidad.
Salvo los meses correspondientes a la campaña mundialista, que registraron presupuestos mayores a los empleados en los meses del año anterior, las empresas mantuvieron su recelo en cuanto a invertir en publicitarse a lo largo del 2018. Y aunque la dinámica se mantendría para el 2019, la industria publicitaria ha empezado a notar en las empresas emergentes un hambre de posicionamiento que ha calzado bastante bien con atractivas propuestas de pauta, derivadas de las recientes alianzas comerciales de medios televisivos, nuevas propuestas de contenidos de medios radiales y escritos y una plataforma de medios digitales bien posicionada y segmentada.
Al parecer en el 2019 la base de anunciantes se ampliaría con las empresas emprendedoras y medianas, para las cuales es vital generar un reconocimiento de marca e incrementar la recordación entre su público objetivo. Y es que hay un interés de estos grupos empresariales emergentes en quitar cuota de mercado a los sectores más posicionados. Ahora que estos últimos anunciantes han bajado el ritmo a su inversión en publicidad, las marcas medianas y emergentes están apostando por aprovechar la oportunidad.
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