Hace poco me enteré que, según Wall Street, en YouTube muchos de los canales más populares del momento, y que en consecuencia son los que más ingresos generan, son creados por personas ‘fantasma’, que se niegan a identificarse. De hecho, en varios casos, estos no necesariamente cumplen con los lineamientos de comunicación que una marca coherente debería salvaguardar.
Grandes anunciantes paralizaron sus pautas en esta red social porque no se garantizaba la calidad del medio. Y es que se encontró que, por ejemplo, en algunos canales ‘infantiles’, aparecían personajes ‘de terror’ o lo que es peor, contenido ilegal. Por esta razón, es fundamental que los marketeros comencemos a asimilar el concepto de Brand Safety, la guía que todo anunciante debería tener para proteger la forma y medio en donde se comunica. Esta debe contener lineamientos explícitos para determinar el entorno adecuado, dejando a un lado vehículos fraudulentos o descontextualizados.
Saber dónde aparece nuestro anuncio no solo es crucial para la reputación online de nuestras marcas, sino también es una responsabilidad que tenemos con nuestros consumidores. ¿O crees que sería correcto pautar un comercial en un canal de alguien que fomenta el bullying solo porque tiene millones de fans? Recuerda: seguridad ante todo.
Educación Ejecutiva ISIL ha diseñado el Diplomado de Marketing Digital. Si deseas más información, rellena el siguiente formulario: