Mes del orgullo
El pasado 16 de mayo el presidente Norteamericano Donald Trump anunció que había tomado la decisión de incluir en la lista negra al gigante tecnológico Huawei, aludiendo que lo considera un peligro para la seguridad nacional, de esta manera colocó el punto final tras varios meses de enfrentamientos. A raíz de este anuncio, la marca china estaría impedida de realizar cualquier tipo de negociación con firmas estadounidenses, en un veto enmarcado en una lucha por la supremacía tecnológica y convirtiéndose en un nuevo protagonista del capítulo sobre la guerra comercial entre Estados Unidos y China.
Este anuncio ha llevado a Huawei a vivir una crisis no solo en el mercado de redes, sino también en el negocio de celulares por las posibles repercusiones que tomarían sus principales proveedores, entre ellos Google y Qualcomm.
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Huawei vs Google
Como consecuencia del impedimento impuesto por la casa blanca a la marca tecnológica china, Google anunció que dejará de dar soporte a los Smartphones de Huawei, lo que abre una interrogante de lo que podría ocurrir con los usuarios de dispositivos de la firma asiática.
Ante la incertidumbre de los millones de usuarios y bajo presiones de Huawei el gobierno americano otorgó una licencia temporal para que la marca china pueda seguir operando con normalidad hasta el 19 de agosto del 2019. Después de esta fecha, los dispositivos del fabricante asiático se quedarán sin actualizaciones de servicios como los de Gmail o Android, lo que supone un problema importante de seguridad para los equipos. Además, no se podrán realizar transferencias de hardware y software, sin ellos no podrán utilizar las aplicaciones ni funciones del Smartphone.
“El veto de Google tiene importantes repercusiones para un proveedor importante como Huawei”, explica Juan Pablo Peñarrubia, presidente del Consejo General de Profesionales de Ingeniería de España, “No solo fabrica teléfonos sino también tabletas y otros productos que utilizan el sistema operativo”.
La posición de Huawei
Fundada hace 30 años por Ren Zhengfei, la firma multinacional de tecnología china especializada en comunicaciones se ha convertido en el primer fabricante de productos tecnológicos del mundo y en el segundo mayor vendedor de teléfonos móviles, superado solo por su par asiática, la coreana Samsung. Tan solo en el año 2018 obtuvo ganancias por unos 7,850 millones de dólares lo que supone un aumento del 25% respecto al año 2017 (CNN, 2019).
Ante este constante crecimiento y con el objetivo de seguir manteniendo sus planes de desarrollo y expansión en el mercado la marca china no está dispuesta a rendirse ante las barreras y vetos comerciales realizando planes de acción.
1.- Mantener calmado a sus clientes:
“Continuaremos construyendo un ecosistema de programación
seguro y sostenible para aportar la mejor experiencia a nuestros
usuarios», ha afirmado la compañía en un comunicado.
Igualmente, la marca china aseguró que continuará aportando actualizaciones de
seguridad a los modelos existentes de Huawei y Honor, así como también a las
tablets, incluyendo aquellos ya vendidos y a los que se encuentran en stock en
el mundo.
2.- Reclamar igualdad de condiciones comerciales:
La tecnológica china en los últimos días ha presentado una nueva moción contra la constitucionalidad de la ley que prohíbe al gobierno de Estados Unidos y sus contratistas comprarle equipos. De esta manera, Huawei intensifica su lucha contra la medida tomada en su contra y denuncia que es inconstitucional.
“Los políticos de EE UU están usando la fuerza de todo un país para arremeter contra una empresa privada”, declaró Song, representante de la firma china, resaltando además que “el gobierno de EE UU no ha proporcionado ninguna prueba que demuestre que Huawei representa una amenaza para la seguridad”.
3.- No estar con los brazos cruzados:
“El nuevo software estaba listo en enero de 2018. Era nuestro ‘plan B’. Pero no queríamos llevarlo al mercado porque teníamos una relación sólida con Google y no queríamos arruinarla”, comentó Alaa Elshimy, director y vicepresidente de Negocios Empresariales de Huawei en Medio Este.
Una empresa en la condición de Huawei lo último que podría haber hecho era quedarse con los brazos cruzados, esperando los desenlaces de los problemas comerciales. Tal como lo confirma Elshimy, director y vicepresidente de negocios empresariales de Huawei en Medio Este, la marca china consideró que podrían cambiar las condiciones del mercado y se anticiparon en lo que sería un hito en el mercado de las telecomunicaciones: que una marca de equipos lance su propio sistema operativo.
De esta manera no estarían condicionados a las decisiones gubernamentales americanas y podrían seguir desempeñando sus funciones comerciales.
4.- Somos Autosuficientes
“Tenemos todos los conjuntos de chips excepto los de Intel para PC y servidores”, comentó Elshimy.
Tal vez este es el punto más importante de la marca china ante este escenario negativo. Demostrar que son autosuficientes con las piezas y dispositivos tecnológicos para la elaboración de los equipos, les daría una ventaja y no sería un impedimento para los propósitos del desarrollo y fabricación de equipos tecnológicos.
“Todos en el mercado están usando el chip de Qualcomm y somos los únicos que usamos nuestro propio chip. Es por eso que podemos ir a la velocidad que queremos”.
¿Podrá sobrevivir Huawei a este escenario?
Los proveedores tecnológicos de Huawei cayeron en promedio 5% en Wall Street el mismo día que se les impuso el veto. A su vez, considerando la facturación de la división de consumo de equipos inteligentes de 49,500 millones de dólares, se asume que el golpe en las ventas sería durísimo para el conglomerado electrónico.
Las acciones de Huawei sin duda son arriesgadas, pero no tiene varias opciones y la compañía no está dispuesta a darse por vencida. Hace unos días Ren Zhengfei aseguró que Trump subestima la fuerza del gigante de las comunicaciones, dejando abierta la posibilidad de que la marca asiática aún tiene planes de contingencia y no bajará la cabeza ante las represalias americanas.
El escenario se proyecta desfavorable para la marca asiática pero aún tiene recursos sólidos en los que se puede apoyar, uno de ellos es la capacidad de innovación tecnológica y el segundo es el poder del mercado chino.
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