El concurso desarrollado por Samsung, premio un criadero artesanal de alga altoandina que ayuda a combatir la anemia y desnutrición en comunidades inmersas en pobreza extrema.
La introducción de las nuevas tecnologías está revolucionando el mundo actual en los diferentes aspectos de la vida. Uno de estos cambios se da en las aulas, lo que ha originado una pertinente revisión de las técnicas pedagógicas. Ello para contribuir a un aprendizaje más autónomo y fomentar el trabajo en equipo, la motivación, curiosidad y creatividad.
En ese sentido, los estudiantes de hoy requieren desarrollar habilidades para una sociedad predominantemente tecnológica para luego desenvolverse de manera competitiva en el nuevo mercado laboral y, de la misma manera, mejorar el entorno que los rodea.
Soluciones para el Futuro
Ante este panorama, por séptimo año consecutivo, Samsung desarrolló Soluciones para el Futuro, un concurso escolar que fomenta la práctica del STEM en espacios educativos. Este enfoque interdisciplinario responde al acrónimo en inglés de Science, Technology, Engineering and Mathematics (Ciencias, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas en español).
Con el respaldo del Ministerio de Educación, el concurso apunta a desarrollar justamente estas nuevas destrezas que los estudiantes necesitan, a través de la implementación del sistema STEM que integra todas estas disciplinas en un enfoque de aprendizaje unido basado en aplicaciones y situaciones del mundo real.
“Desde Samsung, estamos comprometidos con brindar experiencias educativas incorporando el STEM y que los estudiantes puedan encontrar soluciones a problemas de su entorno usando la investigación y las ciencias. Cada año nos acompañan más participantes de todas las regiones del Perú”, sostuvo Cecilia Picoaga, gerente de Ciudadanía Corporativa de Samsung.
Soluciones para el Futuro, dirigido a estudiantes de 3ero a 5to de secundaria de colegios nacionales de todo el país, recibió 1 135 postulaciones, que apuntaron a desarrollar soluciones a los problemas que enfrentan en su vida cotidiana o que afectan a su comunidad. Los finalistas de la edición 2020 representaron a las regiones de Lambayeque, Ayacucho, Apurímac, Puno y Callao, con la implementación de proyectos innovadores y comprometidos con su entorno. Todos ellos recibieron premios de equipos tecnológicos Samsung y capacitaciones en el proceso del concurso.
Además, debido a que el STEM constituirá un pilar fundamental en los futuros trabajos, el concurso se encarga de promover la equidad de género en este campo y la participación activa de la mujer en la formulación de los proyectos.
“Este año, el 56% de participantes fueron estudiantes mujeres y queremos fomentar su participación. Nuestro país necesita más mujeres científicas que aporten al cambio social. Este concurso desarrolla habilidades de liderazgo a través del razonamiento creativo, empatía y resiliencia”, añadió Picoaga.
Proyecto ganador
“Criadero artesanal de alga altoandina” es el nombre del proyecto ganador de esta edición. Los estudiantes de la Institución Educativa “Juan Pablo Vizcardo y Guzmán”, ubicado en la comunidad rural de Totos, generaron un criadero de llullucha, una alga altoandina cuya cantidad de proteínas duplica el de la kiwicha y la quinua, pero solo crece en época de lluvias, es decir, de diciembre a marzo.
Debido a que la comunidad se encuentra en pobreza extrema, la implementación de este proyecto permitirá a los pobladores acceder los 365 días del año a este recurso alimenticio que, además, contiene calcio, hierro, vitamina A y más, lo que permite combatir la anemia y desnutrición.
“Participar en este concurso ha significado una extraordinaria oportunidad de aprendizaje, ya que por primera vez nos involucramos en un proceso de investigación como aplicar los conocimientos científicos para la tecnología. Además, nos ayudó a ser perseverantes y nunca darnos por vencidos, pese a cualquier dificultad que se pueda presentar”, sostuvo Mayra Licas, representante del proyecto ganador.