Luis Cabrera y David Montes, directores creativos de BOOST, conversan con Mercado Negro sobre el rebranding y relanzamiento del Instituto Carrión. Además, nos cuentan sobre su proceso creativo y nos dan detalles de la campaña.
BOOST, la aceleradora de marcas, suma todo su esfuerzo en brindarle a los anunciantes lo que realmente necesitan para posicionarse en el mercado y llegar a las audiencias correctas, ayudándolos así a cumplir sus objetivos, tanto comerciales como estratégicos. Como parte de su proceso creativo, la aceleradora se sustenta en todo el conocimiento obtenido a través de una profunda investigación sobre el entorno, el público, la competencia y muchos otros aspectos de las marcas.
Esta misma metodología ha sido utilizada para desarrollar un importante proyecto relacionado con el sector educativo, el rebranding y campaña de relanzamiento del Instituto Carrión. Luis Cabrera y David Montes, directores creativos de BOOST, lideraron este importante proyecto y le cuentan a Mercado Negro un poco sobre la estrategia.
Estrategia: Público, competencia y medios
“Cada marca es única por lo que deben contar con estrategias propias, sin embargo, hay 3 cosas que consideramos fundamentales para cualquier institución educativa”, indica Luis Cabrera. Lo primero es conocer bien al público, cuál es su background, qué tensiones sociales lo afectan, porque vienen a dicha universidad o instituto y qué buscan más allá de educarse.
A esto le sigue un buen análisis de la competencia, lo que ayudará a determinar dónde debe ubicarse la marca para decir y accionar de forma diferente y disruptiva. Finalmente, es importante entender bien el mundo donde los jóvenes de hoy viven, qué medios y tipos de contenidos consumen, dónde y cómo pueden impactarlos.
Por su parte, David Montes, señala que una “buena estrategia, nos ofrece insumos como insights y observaciones lo suficientemente fuertes para construir un concepto creativo que sea relevante para nuestro público. Una vez definido el concepto, pensamos las ideas para cada medio”.
Asimismo, los creativos de la aceleradora enfatizan que la tv todavía tiene un peso importante, sobre todo porque es la que va a impactar a los padres, que por lo general son los que cubren los gastos educativos de los jóvenes.
“Con respecto a otras categorías, la diferencia está en los medios que vamos a utilizar. Aquí el foco debe estar en digital obviamente”, explican.
El reto de atraer a los jóvenes
Mientras que para algunos asegurarse de encontrar rápidamente una chamba puede ser atractivo, hay otros que por su economía no ponen tanta atención a ello y se sienten atraídos por otros tipos de propósitos, más ligados a los valores de época como son la igualdad, lo ecológico, etc.
Para Montes y Cabrera, son muy pocos los jóvenes que no cuentan con un smartphone, la mayoría consume memes, youtubers, challenges, streamer, bailes en TikTok, etc. Esto los educa narrativa y estéticamente en un mismo lenguaje, el de internet.
Instituto Carrión
En este caso de éxito, la aceleradora ha tenido el control de todo el proceso creativo de refrescar la identidad y el discurso del Instituto, pero sin perder su esencia. Desde el rediseño visual, hasta la campaña de relanzamiento, ha sido responsabilidad de BOOST.
Montes comenta que la estrategia para el instituto parte de un punto de dolor que vivía la marca. En la educación superior, las carreras técnicas, todavía siguen siendo vistas por gran parte de la población como de segunda categoría. A pesar de que el Perú tiene una altísima demanda de profesionales técnicos.
“Reconocer este paradigma fue clave para nosotros y también para el cliente, porque solo determinando el problema, se puede encontrar una solución. Y la que nosotros encontramos, fue revalorizar la labor del técnico en enfermería. Ese se convirtió en nuestro propósito estratégico y punta de lanza para el desarrollo creativo”, finalizan.