¡Muy buena tu imaginación…!
El tema es que sabes que siempre hay quienes hagan posibles tus “imaginaciones” o para decirlo en otras palabras, tu creatividad. Tus pensamientos creativos que vendrán a ser piezas publicitarias.
A esos que “realizan”, fuera del ámbito publicitario, nadie los tiene mayormente en cuenta como profesionales. Casi nunca uno “de fuera”, sabe quién filmó el comercial o de los esfuerzos y desvelos de los productores o productoras, para conseguir lo necesario y volver “real”, lo que tú pusiste sobre el papel. Al final, no se sabe quién grabó el sonido de un comercial, quien compuso el jingle, quienes hicieron las locuciones o fueron los/las modelos.
En el caso de un aviso de periódico, afiche u otra pieza gráfica, el anonimato, en el caso del director de arte, fuera de un espacio profesional muy pequeño, es total (incluyéndote claro a ti, el redactor, como te pasa en otros medios publicitarios).
Pero quienes hacen posibles tus ideas, son muchos, nadie los conoce, pero ahí están, produciendo esa “magia” que es la materialización de tus ideas más locas. Por eso digo siempre, que en la publicidad, la idea no es de “uno”, nada más, sino que confluyen en ella muchas y muy disímiles ideas, que van sumándose, hasta obtener una realidad. Esa, que empezó posiblemente con un “chispazo” tuyo y que -haciendo un símil- “incendiará la pradera”.
La publicidad no eres tú solo. Y te digo que, en realidad, no serías otra cosa que un soñador imaginativo, si no fuera por ese ejército de mujeres y hombres que hacen posible la magia. Nunca dejes de agradecerles lo que hacen por ti y la publicidad. Como tú, aman lo que hacen y son muy buenos en ello.