Esta medida forma parte de una estrategia integral dirigida a fortalecer la identidad de la marca, potenciar su alcance en el ámbito digital y consolidar su presencia como una entidad de alcance global.
Starbucks ha ascendido a su ex CMO, Brady Brewer, al cargo de CEO para el negocio internacional, marcando la tendencia al eliminar el puesto de CMO.
Esta decisión se enmarca en una reestructuración organizativa más amplia, con CEO regionales asumiendo roles clave en los mercados locales. Trabajando en colaboración con el veterano ejecutivo Michael Conway, Brewer buscará revitalizar la marca Starbucks, enfrentando desafíos como boicots y competencia en mercados clave como Estados Unidos y China.
La reestructuración refleja una tendencia general en la que muchas marcas reconsideran el papel del CMO, adaptándose a un panorama empresarial en constante evolución.
Con este cambio, Starbucks busca fortalecer su marca, mejorar su presencia digital y globalizarse, al tiempo que enfoca sus esfuerzos en mejorar la eficiencia y revitalizar su cultura interna.
A pesar de enfrentar desafíos en un mercado competitivo, Starbucks busca dar una respuesta adecuada a través de su nueva estructura organizativa.
Fuente: Marketing Directo