Según datos de la agencia Workplace Intelligence, un 83% de la fuerza laboral sufre de estrés. Por eso, muchas empresas intentan revertir esa tendencia con programas de bienestar, actividades de team building y otras iniciativas.
El mundo laboral sigue experimentando cambios rápidos y significativos que pueden afectar su eficiencia y producción. En ese sentido, en el presente el compromiso de los empleados resulta sumamente importante para las empresas. Sobre todo, bajo un contexto en el que pululan las renuncias como respuesta a una crisis de salud y bienestar en el entorno laboral.
Esto quiere decir que el reto consiste en mantener a los empleados motivados y conectados mientras intentan escalar laboralmente en un mercado en constante cambio. Por eso, surge el fenómeno “quiet quitting”, en el que los empleados renuncian a su compromiso con el trabajo por el desencanto que les genera sus funciones, las cuales cumplen en modo automático.
De hecho, según datos de la agencia Workplace Intelligence, un 83% de la fuerza laboral señala padecerlo. Asimismo, 2 de cada 3 empleados no están comprometidos y terminan «renunciando silenciosamente». Por lo que algunos indicadores que evidencian esta conducta enumeran la falta de participación, entusiasmo y una marcada desconexión con la cultura corporativa.
El reto para RRHH
Como vemos, la ausencia de inspiración y motivación perjudica el desarrollo profesional de los empleados y el corporativo para los empleadores. Entonces, aparece allí un desafío muy relevante para los equipos de Recursos Humanos (RRHH).
Al respecto, Betterfly, la plataforma de protección personalizada con beneficios e impacto social, detecta algunos factores que inciden en el desgano generalizado. Por ejemplo, cuando los trabajadores carecen de un propósito claro, de reconocimiento y no forman parte de un entorno estimulante, su rendimiento disminuye drásticamente al igual que su compromiso con la empresa. Ello produce resultados de desempeño más bajos y crea un clima laboral que llega a afectar el retorno económico de las compañías.
Para intentar revertir esta tendencia, diversas compañías apuestan por programas de bienestar, actividades de team building y otras iniciativas. No obstante, el panorama no parece cambiar, pues uno de los errores más comunes es aplicar soluciones uniformes para un equipo cada vez más diverso en cuanto a necesidades, intereses y aspiraciones.
Por el contrario, una estrategia atractiva demanda reconocer la importancia de ofrecer beneficios personalizados y soluciones adaptadas a cada trabajador. Del mismo modo, es necesario mirar el compromiso laboral desde distintos ángulos, como los vinculados al crecimiento personal de las personas, el balance en su vida y bienestar.
Precisamente, Betterfly combina una amplia oferta de seguros con incentivos corporativos y de impacto social que ofrece una experiencia hecha a la medida. Los usuarios de la plataforma tienen un recorrido único que les permite acceder a experiencias, de acuerdo a los intereses y necesidades de cada miembro. De esa manera, los equipos de trabajo pueden interactuar y construir comunidad, recibiendo recompensas por acciones positivas, como caminar o meditar, con descuentos exclusivos, gift cards, etc.