El 56% de los millennials son considerados “bebedores mindful”, mientras que las generaciones posteriores limitan su consumo de bebidas alcohólicas. La industria de la publicidad tiene una respuesta sobre el fenómeno que aleja a la Generación Z del alcohol
Ver adolescentes descontrolados en fiestas dentro de la narrativa de una serie ya no es una representación fiel de la realidad. Al menos en cuanto a países de Europa y Asia. Por ejemplo, en Japón, hace no más de dos meses la Agencia Tributaria Nacional llevaba a cabo una campaña para “salvar” la industria de bebidas alcohólicas. ¿A qué se debe el débil consumo de alcohol por parte de las generaciones nuevas?
La empresa de investigación de mercados KAM afirmó que el 65% de los jóvenes entre 18 y 24 años (Generación Z) opta por limitar su consumo de alcohol. La muestra se realizó entrevistando a 500 jóvenes británicos. La conclusión fue que ingieren bebidas alcohólicas solo en ocasiones en que valga la pena.
El estudio también revela que no solo moderan el consumo, sino que ocasionalmente no lo consideran. La estadística indica que solo en dos de cada tres visitas a un bar o restaurante ingieren un poco de alcohol. Una de cada tres salidas opta por gaseosas y bebidas por el estilo.
A diferencia de la generación predecesora: los millennials. Se considera que el 56% de los nacidos entre 1981 y 1993 son bebedores “mindful”; es decir, que disfrutan de la experiencia que les brinda el alcohol.
¿Cómo explica el alejamiento de la Generación Z de la industria del alcohol?
Paco Lorente, profesor de la escuela ESIC y director creativo de Sinaia Marketing, señala que la industria ya toma acciones al respecto. Las marcas están “buscando a ese consumidor joven que se decanta por bebidas más suaves y con menos calorías”.
“Para un baby boomer, beber una copa de whisky se asociaba con ser el macho alfa; y tomarse un cosmopolitan, como en la serie ‘Sex and the City‘, con la mujer alfa. Las marcas vendían estatus”, explica el experto en publicidad.
Las variaciones en el consumo de alcohol están ligadas a lo que buscan las nuevas generaciones. “Un estilo de vida, algo más emocional, ese verano idílico en playas vacías, en lugares por descubrir”, dice Lorente.
Pero hay una realidad estadística: cada generación bebe menos que la anterior. El Observatorio Español de las Drogas y Adicciones publicó en un informe de 2021 que solo 10% de los jóvenes de la generación Z bebe alcohol entre semana, mientras que esta cifra sube al 30% entre los baby boomers.