La plataforma de audio, luego de ponerse de moda a nivel global, comienza a decaer, y es justo ahora cuando decide abrirse al público y dejar a un lado su requisito emblemático.
Clubhouse decidió abandonar una de sus características principales: la exclusividad. A partir de este miércoles la app ya no exige invitación a quien quiera registrarse y eliminó la lista de espera, que contaba con unas 10 millones de personas según The Verge, dando entrada a todo aquel que simplemente la descargue.
Según su cuenta en la red Twitter, Clubhouse justifica este movimiento indicando que luego de 16 meses de existencia ya superó la fase beta en la cual era imperante controlar el crecimiento de la comunidad.
No es el único cambio que esta semana recibió la red, que además inauguró su chat de texto, llamado Backchannel, y a propósito de las olimpíadas ahora identifica el avatar de cada usuario con la bandera de su país de origen.
Clubhouse comenzó como una red exclusiva para iOS que además requería para entrar una invitación de un usuario ya activo, quien a su vez contaba con un número limitado de invitaciones. La app llegó a Android en mayo y ahora se abre a todos los internautas.
En su momento de mayor auge, las invitaciones para ingresar a Clubhouse llegaron a venderse por cientos de dólares en eBay. Hoy, cuando debido a la gran competencia que despertó comienza a pasar de moda, da esta movida como un intento de seguir en la palestra. El futuro dirá su sobrevive a la tenaz guerra del mercado para redes sociales.