Starbucks ha intentado obstaculizar el sentimiento sindical, intimidar a los trabajadores e interferir con las operaciones diarias. Trabajadores también denunciaron que un tercio de la fuerza laboral total en la ubicación de Memphis, fueron despedidos hace unas semanas, incluida la mayoría del comité organizador sindical.
La famosa cadena de café Starbucks enfrenta una ola sindical en Estados Unidos en los últimos meses. En más de 60 zonas de 14 estados trabajadores de la firma con sede en Seattle se han organizado en reclamo a décadas de bajos salarios, duras condiciones de trabajo y pocos beneficios.
Los reclamos le han hecho ruido a la compañía y por supuesto no ha dado exactamente una buena bienvenida a estas agrupaciones. Los trabajadores han denunciado Starbucks se ha involucrado en una amplia gama de prácticas antisindicales, que van desde animar activamente a los empleados a votar en contra hasta supuestamente despedir a quienes estaban involucrados.
Dominó sindical
La sindicalización de los trabajadores Starbucks comenzó en Buffalo, Nueva York. En diciembre de 2021 los trabajadores de dos tiendas votaron a favor de sindicalizarse como Starbucks Workers United. El grupo sindical aún no ha presentado demandas. Exigen que se asegure un salario mínimo de US$24 para los baristas, además de mejoras en los beneficios proporcionados por la empresa, como los planes de atención de la salud mental.
La primera intención de movimiento sindical detonó el efecto dominó. En tiendas Starbucks en Boston, Arizona, Washington, Illinois, Florida, Ohio, Maryland, Virginia y California también se produjeron organizaciones de trabajadores.
Sin embargo, no todas las campañas han tenido éxito: de tres ubicaciones en Buffalo, una votó en contra de la sindicalización. Cada tienda se ha sindicalizado individualmente, aunque Starbucks le ha pedido a la NLRB que exija que las tiendas en la misma área voten juntas.
Las cartas de Starbucks
Starbucks se opone a los esfuerzos de sindicalización. Pidió a la NLRB retrasar la certificación de los resultados de las elecciones sindicales de Buffalo, la empresa pidió a la agencia que prohibiera a los trabajadores organizar sus tiendas individualmente.
Otra de las estrategias usadas para frenar la ola sindical es operar un sitio web llamado We Are One Starbucks, en el que alienta a los «socios», como llama a sus empleados, a votar en contra del sindicato.
«No creemos que los sindicatos sean necesarios en Starbucks porque sabemos que los problemas reales se resuelven a través de la asociación directa entre nosotros», se lee en la web.
Como para de su ofensiva Starbucks ha intentado obstaculizar el sentimiento sindical, intimidar a los trabajadores e interferir con las operaciones diarias. En ese esfuerzo la firma también convocó a reuniones antisindicales semanales obligatorias, cerró temporalmente las tiendas sindicalizadas, inundó las tiendas con ejecutivos corporativos y aumentó los salarios.
En enero, un camarero de Buffalo explicaba que Starbucks envió a docenas de «gerentes de apoyo» a su tienda y otros lugares del área para vigilar la actividad sindical.
Trabajadores también denunciaron que un tercio de la fuerza laboral total en la ubicación de Memphis, fueron despedidos hace unas semanas, incluida la mayoría del comité organizador sindical. La medida fue ejecutada luego que los empleados permitieran que los periodistas entraran al café después de horas laborales como parte del lanzamiento público de sus esfuerzos por sindicalizarse.
Según la empresa, los empleados que fueron despedidos habían violado ciertas políticas de Starbucks. Pero los organizadores sindicales dicen que los trabajadores fueron atacados debido a su actividad sindical y que la política no se había aplicado «de manera uniforme» antes del despido de estos trabajadores.
Ola sindical
La organización de los trabajadores de Starbucks con fines sindicales podría detonar nuevos movimientos. Incluso la fuerza laboral de cadenas como Chipotle y McDonald’s han iniciado un proceso de organización de sindicatos a un ritmo sin precedentes, probablemente debido a la tensión y las dificultades financieras inducidas por la pandemia.
Los movimientos sindicales surgen justo cuando los costes de alimentos y la gasolina, han aumentado, mientras que los salarios están estancados y eso hace que la sindicalización sea una perspectiva muy atractiva.
La victoria del sindicato envía un mensaje no solo a los trabajadores de Starbucks en todo el país, sino también a los trabajadores de industrias de bajos salarios y alta rotación, que durante mucho tiempo han evadido la sindicalización en los Estados Unidos.