Tras dos meses de confinamiento, las marcas se encuentran ante un nuevo consumidor. ¿Cómo deberán las marcas afrontar este desafío?
Existen dos tipos de empresas, las que han pasado una crisis o las que van a pasar una crisis, y es que en un contexto donde la única constante es el cambio, las empresas se enfrentan a una serie de retos o crisis, internos o externos, que, bien gestionadas, pueden volver más fuerte a la organización, e incluso, destacar su ventaja competitiva.
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La crisis producida por el COVID-19 es un suceso que en el mundo moderno no ha tenido precedentes. Con toda la humanidad en cuarentena, los consumidores adoptan nuevas prioridades lo que exige a las marcas reinventar sus estrategias de comunicación y marketing. En ese sentido, Probrands, consultora de branding con más de 10 años de experiencia, brinda 4 pautas para que las organizaciones puedan reencontrar el camino más efectivo de llegar a sus clientes en esta coyuntura.
Indaga sobre tu marca
La idea que tenías de tu cliente ya cambió. Y la de tu competencia también. Hasta hace poco Airbnb se había convertido en la competencia no esperada por las grandes cadenas de hoteles. Hoy, estas últimas son la competencia no esperada de WeWork: Casa Andina y otros hoteles están alquilando espacios para vivir y/o trabajar desde US$500 mensuales. Pastelería San Antonio ingresa como jugador al mundo de retail alimentos. Linio y Mercado Libre empiezan a golpear el tráfico de Real Plaza. Si esto es lo que está sucediendo a niveles de grandes empresas, imagina lo que está sucediendo en la mediana y pequeña empresa. Por eso debes empezar ya, utiliza las herramientas disponibles digitales para preguntarle a tus clientes y a los de tu competencia: ¿Cuáles son tus 3 principales atributos?, ¿Por qué compran tus productos?, ¿Contra quiénes compiten?, ¿te recomendarían? ¿Qué dicen de tu marca? Al menos 36 entrevistas que incluyan estas preguntas y otras ayudarán a entender dónde estás parado y cuáles son tus oportunidades. Luego escoge los 5 principales hallazgos y verifícalos cuantitativamente a través de alguna herramienta disponible como SurveyMonkey. También puedes investigar en redes sociales a un costo muy accesible.
Crea una historia
Con la información obtenida, gesta un relato que se relacionen con tus clientes, que cause inspiración y comulgue con el ADN de tu marca. Y cuándo hablamos del ADN de tu marca, es tu historia. Debe reflejar a quiénes atiendes, qué ofreces que otros no lo hagan (ventaja competitiva) y qué aspectos respaldan esa ventaja ( 3 atributos clave de tu negocio). Si no tienes agencia, contrata un redactor freelance para que potencie aún más tu historia.
Revisa tu identidad
Con tu nueva historia ya definida, pregúntate si tu identidad verbal y visual refleja dicha historia o si debes modificarla de cara al futuro. Revisa tu slogan, tus mensajes clave, tu línea gráfica, y revisa la de tu competencia. ¿Están estos elementos estratégicos a la altura para la nueva batalla? ¿Generan un sentimiento de orgullo para tu equipo y para ti?
Comunica
Revisa cada punto de contacto y actualízalo con tu nueva identidad. Desde una web responsiva, hasta tus distintas puertas o puntos de contacto: redes sociales, campañas de emailing, central telefónica y fuerza de ventas. Convierte a tus colaboradores en los principales vehículos de tu propuesta de valor. Haz que se sientan identificados con tu nueva historia y vívela cada día junto a ellos.
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