Aplicar tecnología a los alimentos puede ser una solución al desabastecimiento y la preservación de estos. La tendencia de los consumidores por elegir comestibles saludables pronostica una favorable acogida para los negocios foodtech.
Frente a la crisis económica a nivel mundial, el desabastecimiento de alimentos se presenta como una problemática latente. La preservación de comida mediante tecnología puede resolver esta problemática. El foodtech es un modelo de negocio basado en aplicar tecnología a los alimentos para mejorar la producción el consumo. Conoce ejemplos de negocio y por qué esta industria creció en 220% en España durante 2021.
José Luis Cabañero, CEO y fundador de la aceleradora gastronómica Eatable Adventures, señala a El País que “este concepto aporta eficiencia, seguridad, una mejora importante de la sostenibilidad y de la elaboración de alimentos más saludables”. El Instituto de Comercio Exterior de España señala que más de 400 startups trabajan desarrollando la cadena de valor agroalimentaria.
¿Por qué está casi garantizado el éxito de los negocios foodtech?
“El consumidor es el impulsor principal de esta innovación, tanto por las corrientes emergentes como por la creciente demanda de alimentos a nivel mundial. Se prevé tener que alimentar a 9.700 millones de personas en 2050, lo que significa aumentar un 70% la producción”, explica Cabañero en torno a los factores que hacen posible el crecimiento de la industria.
Además, la problemática del cambio climático hace del foodtech una oportunidad de valor multiplicado. El fundador Eatable Adventures refiere que se puede usar la innovación para “reducir la dependencia de las importaciones, garantizar la seguridad alimentaria y adaptarse a los retos”. El especialista cuenta con una startup dedicada a la bioimpresión de proteínas alternativas en 3D.
La rentabilidad y la preservación de los alimentos no son las únicas causas para garantizar el éxito de este tipo de negocios. También responden a la tendencia de alimentación saludable que exigen los consumidores. Por ejemplo, el negocio de origen mexicano Yay comercializa alimentos deshidratados con todos sus nutrientes gracias a un delicado proceso de liofilización.
Juan Carlos Guerra, creador de Yay, explica el proceso: “La liofilización permite que algo pierda peso, se desprende del 99% de agua”. Sus snacks son productos 100% naturales y llegan a la mano de los consumidores como mango, piña, fresas o palta en forma de bocadillos crujientes con sus nutrientes inalterados.