¿Cómo un error de FOX cambió el comercio cinematográfico? Te lo contamos en este post.
Un choque entre la mítica saga de Star Wars y la casa cinematográfica 20th Century Fox dio origen al merchandising cinematográfico. Todo comenzó en agosto de 1973, cuando el joven George Lucas vio una luz de esperanza cuando el estudio accedió a entregarle el dinero suficiente para que inicie la producción del que sería el proyecto de su vida.
FOX solo le dio a Lucas 10 mil dólares. La empresa no confiaba en que Star Wars se convirtiera en un éxito, y ante las dificultades de encontrar financiación para la primera película el astuto cineasta demostró que sus habilidades no solo se centraban en el séptimo arte, sino que también tenía buen olfato para los negocios.
Lucas le ofreció al estudio renunciar a dos terceras partes de su salario de 500 mil dólares a cambio de conservar los derechos de las posibles siguientes entregas y de la comercialización de la franquicia. FOX accedió creyendo que se trataba de un trato más que beneficioso para la empresa y la historia se ha encargado de recordarle todos los días que no tuvo la razón.
Con la jugada, Lucas le otorgó valor a un nicho que era prácticamente irrelevante en el mercado de películas hasta la llegada de Star Wars: la comercialización de productos conmemorativos y juguetes que podrían surgir de estas, es decir, el merchandising.
Los intringulis de esta historia incluyen la asociación de Lucas con una empresa juguetera y un boom comercial que todavía hoy crece y crece. En total, el cineasta se ha embolsado unos 4 mil 400 millones de dólares solamente con la venta de los productos de sus tres primeras películas interestelares (aquellas que nacieron entre los años 70 y 80).
Conoce con más detalles esta historia de cine y marketing en el siguiente videoinforme de Mercado Negro: