Un reciente informe de Buk proyecta que la inteligencia artificial impulsará mercados internos de habilidades, liderazgos más horizontales y herramientas predictivas para el bienestar, en un contexto donde el 67% de grandes empresas de la región ya intensificó su adopción tecnológica.
La adopción de inteligencia artificial ya no avanza como una tendencia opcional en América Latina. Según IBM, el 67% de las grandes empresas de Argentina, Brasil, Chile, México y Perú intensificó el uso de estas tecnologías en los últimos dos años. La región vive una transición acelerada hacia modelos de trabajo basados en datos, automatización y toma de decisiones más anticipada. En ese escenario, Buk presentó su Estudio de Tendencias de Recursos Humanos 2026, con una mirada que apunta a una transformación estructural de la gestión del talento.
Para la plataforma, el movimiento más relevante ocurre dentro de las organizaciones: las áreas de recursos humanos ya no concentran su energía en los cargos que figuran en el organigrama, sino en las habilidades reales que cada colaborador puede aportar. “El informe subraya que estas tendencias no describen un futuro lejano, sino uno que ya comenzó. La IA está moviendo el foco desde los cargos hacia las habilidades reales de las personas, y eso cambia la manera en que contratamos, nos desarrollamos y lideramos”, señala Sebastián Ausín, country manager de Buk Perú.
Un nuevo mapa laboral impulsado por IA
El estudio plantea que las compañías utilizarán IA para identificar, validar y actualizar las capacidades de sus equipos. Con esa información, las áreas de talento podrán mover a las personas hacia nuevos proyectos con mayor rapidez, creando un flujo interno de oportunidades que antes requería procesos extensos. Este mapeo inteligente no solo reorganiza la movilidad interna; también reconfigura la relación entre aprendizaje, compensación y crecimiento profesional.
Buk describe seis tendencias clave que marcarán la agenda 2026. La primera apunta a ecosistemas de habilidades certificados por IA que formen redes de talento más flexibles. A esto se suma el AI career coach, que llevará orientación profesional personalizada a todos los niveles. La tercera tendencia destaca los digital twins, réplicas virtuales que permiten anticipar riesgos de sobrecarga o burnout antes de que afecten a equipos reales.
La cuarta predice un cambio radical en los procesos de selección, ya que las empresas dejarán de basarse únicamente en currículos y apostarán por modelos que integren trayectoria, potencial y estilo de aprendizaje. La quinta aborda la necesidad de una gobernanza participativa de los algoritmos, mientras que la sexta describe un liderazgo distribuido donde incluso los puestos de entrada dirigirán tareas junto a sistemas inteligentes.










