Crear un personaje para promocionar una marca es una de las mejores estrategias para reforzar la identidad o branding de una empresa. En el argot publicitario se conoce como gimmick, que se refiere a todo elemento añadido a una campaña publicitaria con el objetivo de que sobresalga del resto de la publicidad y que de forma aislada no tiene mayor valor. Puede ser una caricatura, una persona o una mascota.
Este personaje debe representar los valores de la marca o producto y ser un “gancho” de atracción para los consumidores. La ventaja es la estrecha relación con los usuarios y se transmite de manera sencilla y amigable el mensaje de la marca.
En nuestro país, desde hace unos años se viene incrementado el uso de estos personajes y en este informe te mostraremos un listado de los 20 personajes de marcas peruanas más entrañables de nuestra publicidad.
El Cuy Mágico de BCP
El Cuy Mágico es la campaña publicitaria del BCP dirigida a los microempresarios. Empezó como un producto del Seguro Pequeña Empresa y ahora es la imagen icónica del banco. El objetivo de la campaña fue posicionar a esta entidad financiera en el segmento de las PYME, y vaya que se convirtió en líder en el público objetivo y hasta ganó el Efie de Oro en su categoría en el año 2012. El personaje es un peluche de cuy de tamaño de una persona. Es carismático sobre todo, cantante, emprendedor, bailarín y hasta gurú del dinero rápido. Fue tan acertado y aceptado el personaje, que no solo logró el posicionamiento del banco en el sector de préstamos e inversiones a los microempresarios, también fueron apareciendo otros personajes ligados a la familia del cuy para impulsar la campaña de marketing y ahora es un boom en el recordatorio del público.
Oveja Negra de Donofrio
La oveja negra de los helados Donofrio es una creación de la agencia JWT Perú. Es una campaña atrevida y muy creativa, como el público objetivo al que está dirigido el producto, el juvenil, sobre todo adolescente. El eslogan es directo: “solo para incomprendidos”. La idea es clara: no ser uno más del montón, ser rebelde. Y no hay mejor ejemplo de ello que el reflejo de una oveja negra, una forma diferente de no seguir al mismo rebaño de siempre. Con esta campaña publicitaria, que ya tiene buen tiempo con el personaje (y que por sí solo se le identifica con el producto), el helado Sin parar se ha posicionado enteramente en su objetivo, un helado que muestra la actitud juvenil y hasta surrealista de la marca.
Sapo de Sapolio
El Sapo Sapolio “humaniza” la marca para conquistar a las amas de casa. Es el personaje amigable, fresco, que canta y baila rap y ha sabido posicionarse muy bien en determinados sectores. Sapolio es el paraguas de un amplio portafolio de produc
