Mes del orgullo
Burger King entró a Rusia hace una década, operando la empresa en una sociedad conjunta con el empresario Alexander Kolobov, quien tiene el 85% de las acciones en el país europeo.
Burger King intenta suspender sus operaciones en Rusia, pero un comercial que controla 800 restaurantes se ha «negado» a cerrarlos, dijo la compañía. La cadena de hamburguesas tiene una sociedad conjunta con el empresario Alexander Kolobov en Rusia. La compañía controla solo el 15% de su negocio en Rusia, y Kolobov es responsable de las «operaciones diarias y la supervisión» de sus locales en el país.
«Hemos iniciado el proceso para deshacernos [de] nuestra participación en el negocio», dijo David Shear, presidente de las operaciones internacionales de Restaurant Brands International, propietario de la marca Burger King en una carta abierta. «Aunque nos gustaría hacerlo inmediatamente, está claro que nos llevará algún tiempo hacerlo en base a los términos de nuestro acuerdo de empresa conjunta existente».
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Cabe recordar que Burger King entró a Rusia hace una década, operando la empresa conjunta con Kolobov, Investment Capital Ukraine y VTB Capital, un banco ruso que ha sido objeto de sanciones.
«No hay cláusulas legales que nos permitan cambiar unilateralmente el contrato o que permitan a cualquiera de los socios simplemente abandonar o anular todo el acuerdo», dijo Shear. «Ningún inversor serio de ningún sector del mundo aceptaría una relación comercial a largo plazo con cláusulas de rescisión endebles».
Este asunto evidencia los problemas a los que se enfrentan algunas empresas y bancos occidentales para retirarse de Rusia, complicados por las empresas conjuntas o asociaciones sobre las que no tienen un control total.
Otra empresa que tiene una situación similar es Papa Johns (PZZA), que en Rusia se negó a cerrar unos 200 locales, incluso después de que la cadena de pizzerías suspendiera su apoyo corporativo.
McDonald’s, en cambio, posee más del 80% de sus restaurantes en Rusia. Esto facilitó la salida del país.
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