El 24 de diciembre la franquicia vende entre cinco y diez veces más que cualquier día. La estrategia de marketing que originó la tradición japonesa en Navidad fue ideada por el administrador de la primera tienda en el país asiático, quien posteriormente se convirtió en presidente ejecutivo de todo KFC Japón
La cultura japonesa ha tomado protagonismo en el consumo de los países occidentales con el paso de los años. En Perú, cuando menos, muchas tribus digitales se compenetran por productos culturales originados en el país asiático. Pero ¿cómo sucede a la inversa? Es decir, cuando los productos occidentales se instalan en Japón. Un excelente ejemplo es el pollo de KFC, que se ha convertido en una tradición en Navidad.
Kentucky Fried Chicken es el rey del consumo cuando llega la temporada de fiestas navideñas a Japón. Sorprendente para un país donde no más de 1% se considera católico. ¿Cómo sucedió? KFC abrió su primera tienda en Japón en Nagoya (1970). No era la primera franquicia de comida rápida, pero fue avasallante. En 1981 ya había abierto 324 tiendas y sus ingresos bordeaban los 200 millones de dólares al año.

«Parecía que, de repente, Kentucky Fried Chicken estaba en todas partes», dice Ted Bestor, profesor de la Universidad de Harvard especialista en comida y la cultura japonesa en los últimos 50 años. En contexto, la economía y el consumo de los japoneses despegaba luego de la Segunda Guerra Mundial. «Dado que EE.UU. era una potencia cultural en ese momento, había un gran interés en la moda occidental, la comida, los viajes al extranjero”, dice Bestor.
Posicionarse como la comida favorita en Navidad no ha sido una casualidad para KFC. Los reportes señalan que Takeshi Okawar, que dirigió la primera tienda y luego se convirtió en presidente ejecutivo de KFC Japón, vendió la idea de que el pollo frito era un alimento tradicional en la Navidad estadounidense. Pero la versión oficial de KFC Japón lo niega.
La información oficial es que Okawara asistió a una fiesta navideña vestido como Papá Noel. Dicen que a los niños les encantó y el ejecutivo descubrió una oportunidad de negocio. En todo caso es un hecho de que su éxito se debió a una bien lograda campaña publicitaria. Supieron representar a familias disfrutando un festín navideño con la canción «My Old Kentucky Home» de fondo. ¡Como si se tratase de un villancico!

CNN obtuvo una declaración que grafica muy bien el trabajo de KFC en el imaginario de los japoneses sobre la Navidad. «Los comerciales festivos son lo que inicialmente me hicieron querer probar comer KFC para Navidad», dijo un bibliotecario que vive en Iwakuni en la isla de Honshu. «Soy del campo y no había demasiados KFC, así que KFC era algo genial». Un dato no menor es que este pollo frito se asemeja al karaage japonés. Es decir, hay una compatibilidad.
Según KFC Japón, ganaron aproximadamente 63 millones de dólares entre el 20 al 25 de diciembre de 2018. Los reportes indican que los clientes suelen hacer filas fuera de sus tiendas desde el 23 de diciembre.
Aprovechando esa tradición, la franquicia en España está llevando a cabo una campaña. Bajo la dirección de la agencia creativa PS21 se está compartiendo un spot para promocionar “Los Otaku”. La oferta es una serie limitada que se conforma por una Burguer Otaku, el Cubo Otaku y complementos como tiras de y alitas picantes, además de salsa teriyaki.