Mes del orgullo
Gatos. Con amigos y vecinos cada vez más ocupados por sus viajes, Romina se convirtió en una cuidadora confiable de felinos. Lo que comenzó como un acto de solidaridad se transformó en un exitoso emprendimiento de cuidado de gatitos a domicilio.
A inicios del 2021, pese a que la pandemia continuaba, ya se empezaba a vislumbrar la posibilidad de recobrar la vida que muchos tenían antes de la llegada del coronavirus. Los vecinos de Romina Verjovsky cada vez viajaban más, y aquellos que habían decidido adoptar gatos, se encontraban en busca de alguien que pudiera cuidarlos mientras disfrutaban de su tiempo libre.
Al lado del departamento de Romina vivían unos amigos que tenían dos hermosos felinos, a quienes ella ya había cuidado en algunas ocasiones. Con el tiempo, más personas se enteraron de su habilidad para encargarse de estos animalitos y comenzaron a contactarla cuando salían de viaje o tenían que ausentarse por trabajo.
En agosto de dicho año, Romina percibió que existía un nicho insatisfecho en el mercado. La pandemia impulsó la tenencia de gatos, ya que no requerían la misma atención que los perros. Sin embargo, muchos dueños no sabían cómo encargarse de sus felinos durante sus ausencias. Ahí fue cuando surgió la idea de ofrecer un servicio de cuidado de gatos a domicilio, pero se enfrentaba a un desafío importante: ¿Cómo ganarse la confianza de las personas para ingresar a sus casas?
La emprendedora decidió investigar más a fondo. Consultó a amigos que tenían estas mascotas para entender cómo podía llevar a cabo la idea que estaba rondando en su cabeza.
Pese a sus miedos, en octubre del 2021 lanzó «KittyCare – Cuidado personalizado de gatos a domicilio». Paulatinamente, Romina comenzó a recibir visitas y consultas. Aunque la tenencia de gatos era un mercado relativamente pequeño, el negocio creció mes a mes.
“Empecé a crear diferentes nombres, ideas, grilla de contenido para publicar en redes. Empecé a planear alianzas con veterinarias, municipalidades, marcas de comida, influencers, etc. Le fui dando forma al emprendimiento. Jamás imaginé hacer uno, siempre tuve miedo de lanzarme a lo desconocido, a enfrentarme a la competencia, pero si uno ve una oportunidad hay que tomarla y aprovecharla, y eso fue lo que hice”, comentó Romina para Mercado Negro.
La cobertura de KittyCare se expandió a distritos como Callao, San Miguel Surco y Barranco, así fue como la emprendedora se dio cuenta de que necesitaba ampliar su equipo y logró que más amigos de los gatos se unieron a ella.
En noviembre de 2022, Romina decidió cambiar el nombre de su negocio a «Catcare – Cuidado de gatos a domicilio». Después de un arduo trabajo en Indecopi, logró patentar la marca y realizar la transición en redes sociales, manteniendo la esencia del nombre anterior.
“La primera semana de enero de 2023 hice el cambio de nombre en las redes sociales. Modifiqué levemente el logotipo, mantuve la tipografía, colores, y evité despegarme del anterior nombre, así a las personas no les generaba ruido. Día a día seguimos creciendo, tratamos de generar conciencia en los dueños de gatos, aconsejándoles e informándoles acerca del cuidado que los gatos necesitan”, detalla la emprendedora.
En la actualidad, Catcare se ha ganado la confianza de 129 hogares gatunos. Romina y su equipo se encargan de todo, desde cambiar el agua y la comida hasta limpiar la caja de arena y brindar amor y cariño a los gatitos. Además, envían fotos, videos y un informe diario de las visitas para mantener a los dueños informados.
Lo que comenzó como una idea en un momento de incertidumbre se ha convertido en un negocio sólido y en un refugio seguro para los felinos de Lima. A lo largo de estos casi dos años, Catcare ha demostrado que el cuidado de mascotas a domicilio es más que una necesidad, es una muestra de amor y compromiso hacia nuestros amigos peludos.
