Luego de 12 años, la ONG cambia de nombre para multiplicar su misión solidaria, llevando abrigo, alimento y educación a diversas partes del país.
Juguete Pendiente fue fundada en el 2013 con la misión de mejorar la calidad de vida de comunidades en situación de vulnerabilidad, mediante proyectos sociales sostenibles y sustentables. La ONG ha ayudado a más de 3 millones 864 mil personas de 22 regiones del Perú con más de 800 proyectos, programas e iniciativas de voluntariado y responsabilidad social.
El impacto que Juguete Pendiente es innegable e iniciativas como “Ollas que desarrollan” y “Aula sustentable” lo avalan. Asimismo, desarrollaron una cadena de ayuda durante desastres naturales como el Fenómeno del Niño o el ciclón Yaku.

En diciembre, la ONG repartió alegría a miles de niños, a través de “Juguetería Itinerante”. Por medio de esta acción, niños de comunidades en Lima (Ancón, Santa Rosa, Ventanilla, Lurigancho, Pachacámac, Villa El Salvador, Villa María del Triunfo) y Cusco (Pampacorral y Chaypa) recibieron regalos, alimentos y bebidas por navidad.
Nuevos aires
Tras 12 años de trabajo sostenido, Juguete Pendiente cambia de nombre a Perú Pendiente. De esa manera, multiplicará su misión solidaria, llevando abrigo, alimento y educación a diversas partes del país.
“Hoy el Perú nos vuelve a retar. Las comunidades, los sueños que hemos conocido y los desafíos que enfrentamos nos piden ampliar nuestro alcance. Por eso, Juguete Pendiente evoluciona y renace como Perú Pendiente”, explican Vanessa Vásquez, Luis Alberto Vásquez y Neil Dextre, fundadores de la ONG, en un comunicado compartido en redes.
Además, señalan que el cambio de nombre representa una transformación para reafirmar su función. “Seguiremos llegando donde otros no llegan, tejiendo redes, movilizando voluntades y creando soluciones sostenibles con las propias comunidades”, resumen.