En un intento por modernizarse, la marca de automóviles de lujo ejecutó en noviembre del año pasado una campaña de rebranding llena de colores vibrantes y slogans poco habituales para Jaguar. ¿El resultado? Una caída histórica en sus ventas.
En noviembre del 2024, Jaguar creó una nueva narrativa alrededor de la marca de autos de lujo para intentar modernizarse. En la era de TikTok y los carros eléctricos, la compañía buscó como adentrarse en la tendencia para conectar con audiencias más jóvenes.
Desde hace años, la marca es reconocida por su elegancia y herencia deportiva. Sin embargo, los creativos decidieron dejar atrás estas características para darle paso a valores modernos e inclusivos. No bastó con utilizar slogans fuera de lo común, sino que incluso prescindieron de los propios automóviles en su spot.
¿El legado de Jaguar fue olvidado?
El spot publicitario con el que anunciaron este rebranding estuvo lleno de modelos vestidos con colores vibrantes, modelos andróginos y música estrambótica. El lema fue ‘copy nothing’. En ningún momento apareció un auto de la marca, pese a que en el sector automotriz es lo mínimamente esperado.
Según la compañía, deseaban mostrar su camino hacia el futuro, la inclusión y los vehículos eléctricos. Sin embargo, el spot dio resultados contrarios: le quitó su identidad, confundió a su mercado y apagó esa característica que los hacía diferentes.
No se trató únicamente de un cambio de logo, sino que en el camino perdió su identidad. El anuncio que fue catalogado como ‘woke’ dejó atrás sus principales pilares: elegancia, tradición automotriz y desempeño potente. El propio Elon Musk puso un comentario que reflejaba la opinión del público: “¿Todavía venden autos?”.
Desplome de ventas
En abril de este año, las ventas en Europa cayeron en un 97,5%. Mientras en 2024 vendieron 1961 autos, al año siguiente solo vendieron 49 vehículos. Esto ocurrió solo cinco meses después del relanzamiento de la marca.

Además del polémico spot, Jaguar cometió otro error dentro de sus acciones de rebranding. La compañía retiró sus modelos a combustión sin tener lista su nueva línea eléctrica. Así, en el primer semestre del año, muchos concesionarios no tenían inventario qué ofrecer.
Como parte de esta caída, el hashtag #GoWokeGoBroke resurgió con fuerza poniendo a Jaguar como un claro ejemplo de esta estrategia. Hasta la fecha, la compañía continúa con su nueva identidad, sin embargo, las ventas continúan desfavorables.










