Con humor local e incluso referencias políticas, la plataforma estrena en Argentina una campaña que usa las fiestas como escenario para despedir a una de sus series más icónicas.
Diciembre en Argentina, como en buena parte de Latinoamérica, siempre trae lo mismo: calor, mesas largas, discusiones inevitables y una sensación de déjà vu que se repite año tras año. Esta vez, Netflix decidió apoyarse en ese ritual colectivo para lanzar una campaña que no esquiva la tensión, sino que la resignifica desde la cultura pop.
De la mano de Monks Buenos Aires, la plataforma aprovechó la cercanía del final de Stranger Things para proponer que durante estas fiestas, la única grieta válida será la del Upside Down. El resultado combina sátira política, clima navideño y referencias directas a la serie, sin perder cercanía ni el tono local característico de Argentina.
Netflix Argentina: cuando la cultura pop se mete en la sobremesa
La pieza central de la campaña toma forma en un video de larga duración que retrata escenas reconocibles para cualquier hogar argentino. Entre platos que no alcanzan, ventiladores al máximo y comentarios cruzados, los diálogos avanzan con una doble capa de sentido. Lo que parece una discusión más, termina llevando al universo de Hawkins.
La estrategia no se queda en lo audiovisual. Netflix despliega un ecosistema de piezas que incluye vía pública, contenidos digitales, adaptaciones para televisión y colaboraciones con influencers. Cada formato refuerza la misma idea de que Stranger Things forma parte de la conversación cotidiana, incluso en un contexto tan cargado como las fiestas.










