Sus amigos dicen que está loco, que es brillante, un genio, un crack de la publicidad, y lo dicen con justa razón porque Gonzalo se ha vuelto uno de los publicistas más rankeados en el mundo y es producto nacional.
Empezó en Perú, donde pasó por muchos lugares (desde radio y televisión hasta ¡el circo!). Así, probando oficios llegó a la industria publicitaria y empezó su formación en agencias como  ,McCann y Y&,R. Su trabajo le otorgó tal reconocimiento que lo llevaron a Chile y luego a Argentina.
En una entrevista con el diario Perú21, Figari recordó un poco lo que vivía por aquellos días de cambio: “Como muchos peruanos, salí del Perú a finales de los 80. Mi primer destino fue Chile. Como publicista, una de las primeras cosas que hice fue tratar de conocer y comprender la idiosincrasia del chileno. Justo llegué cuando se acababa de ir Pinochet, y todo lo militar era rechazado. Recuerdo que teníamos la cuenta de KFC, y no podíamos llamar al personaje que representa la marca ‘Coronel Sanders’, sino ‘Señor Sanders’. El consumidor chileno era temeroso, con miedo al ridículo: no se podía hablar de sexo, de religión y, repito, de militares”.
Años después, Chile le quedó chico y se tuvo que mudar a Argentina, un país mucho más destacado en cuanto a creatividad se refiere. La situación en el país de la Patagonia era totalmente distinta a la de Chile: “Allí la gente es gritona, todo lo saca para afuera, putea. En Chile no puedes hablar mal de Chile, menos si eres peruano. En Argentina todos putean a su ciudad, a sus políticos, a su país. Y yo siempre he buscado la empatía con la gente y, a partir de ella, crear conceptos. Lo curioso es que destaqué en un lugar donde los creativos sobran: junto con los futbolistas, los publicistas son el principal producto de exportación de Argentina”.
Con el tiempo, le fue tan bien en Argentina que Gonzalo se terminó por aburrir. No le gusta la comodidad, lo que se da por sentado, dice que la creatividad nace de la complicación. Entonces le ofrecieron irse a España y aceptó la propuesta casi sin pensarla, aun cuando le iban a pagar menos. Su agencia, d6 (Volver d6 en nuestro país), no tardaría en aparecer, pero parece que Figari se toma las cosas con calma: ,“Yo voy todos los días a mi oficina caminando, no tengo auto, mi casa es alquilada. Vivo con mi chica, pero no estoy casado ni tengo hijos. Mario Andretti, el italiano que fue campeón de Fórmula 1, decía que, si todo lo tenías bajo control, significaba que no estabas corriendo lo suficientemente rápido, que no habías dado todo de ti, que hay que darle espacio al caos, a lo imprevisible. Su frase no solo se aplica a mi trabajo, se aplica a mi vida: es mi máxima, determina mi forma de vivir. La vida no debe ser fácil. Cuando empiezas a creer que sí lo es, significa que algo estás haciendo mal”, dijo al diario nacional mostrando su filosofía de vida tan peculiar.
Entre sus últimas campañas exitosas, Figari dirigió “Los perfumes de la historia” para la serie de Movistar TV y History Channel “Un mundo en guerra”. La idea detrás de la campaña era mostrar los olores que representaban a los hombres que cambiaron al mundo durante el periodo de guerras para llamar la atención del público. Gracias a este esfuerzo de promoción, la serie terminó como la más vista en el 2014.
Hoy ,Gonzalo Figari estará al frente de un jurado que contará con otros tres peruanos destacados en el Festival Iberoamericano de la Comunicación Publicitaria ",El Sol",. Junto a Figari estarán