La cantante será representada por un nuevo abogado en su lucha por librarse de la tutela de su padre y sus fanáticos celebran a las afueras del juzgado.
Luego de 13 años bajo la tutela de su padre, Britney Spears escogió su abogado para dirigir su lucha para revertir las condiciones de la tutela que según la propia artista le han causado mucho daño. La cantante le adjudico este logro a sus fanaticos, quienes desde hace algunos años han llevado su campaña #FREEBRITNEY de las plataformas digitales al activismo de calle, donde además celebraron esta nueva noticia.
La Corte Superior de Los Ángeles decidió este miércoles que Britney Spears pueda elegir a su propio abogado. Por tal motivo, ahora estará representada por Mathew Rosengart, un abogado reconocido por llevar casos de celebridades como Sean Penn y Steven Spielberg y que tendrá como objetivo principal sacar a Jamie Spears de la tutela.
Desde el inicio de la tutela, Britney ha sido representada por Samuel Ingham, un letrado designado por la corte quien renunció al caso después de que su labor fuese criticada tras quedar en entredicho cuando la cantante señaló que nunca le dejó hablar en contra de la tutela y que, por si fuera poco, nunca le informó sobre su derecho a pedir la finalización de la tutela.
Pero, lejos de acabar ahí, la repercusión de la audiencia de Britney propicio la renuncia de la firma Bessemer Trust, que supuestamente debía ejercer como cotutor de la fortuna de la artista. La empresa aseguró que creía que la cantante estaba de acuerdo con su participación en la cotutela, creencia que abandonaron tras ser testigos de la descripción del caso por la propia Spears como “abusiva”.
De igual forma, el hecho de que Britney pueda escoger a su propio representante legal pone en tela de juicio la existencia de la tutela legal en sí misma, un mecanismo reservado para aquellas personas gravemente incapacitadas y, quienes se supone, no pueden valerse o hacerse cargo de sí mismas.