Según un informe realizado en Estados Unidos por PYMNTS, una tercera parte de los «zillennials» reside aún con sus padres. Además, el 54% de ellos tiene un empleo a tiempo completo.
En la actualidad, la segmentación demográfica es mucho menos confiable que en el pasado y las marcas deben mirar más allá de estos grupos específicos para reconocer los nichos que se van creando.
Entre los millennials y la Generación Z están apareciendo un nicho de mercado denominado «zillennials», que abarca a los nacidos entre 1990 y 2000 y disfrutan de muchísimo poder de gasto, por ello se han convertido en un target cada vez más deseado por las marcas.
El poder adquisitivo de los «zillennials» reside en que son jóvenes que continúan viviendo con sus padres, por lo que disponen de una gran cantidad de ingresos que no se destina únicamente a pagar alquileres exorbitantes.
Según un informe realizado en Estados Unidos por PYMNTS, una tercera parte de los «zillennials» reside aún con sus progenitores y no están pagando aún ni alquileres ni hipotecas. Además, el 54% de los jóvenes adscritos a esta «microgeneración» tiene un empleo a tiempo completo, mientras que el 12% trabaja a tiempo parcial.
Los «zillennials» y la digitalización
El estudio también señala que el 85% de los «zillennials» son usuarios de las redes sociales y utilizan las plataformas de vídeo en streaming. Asimismo, el 81% de ellos está presente en las plataformas de música en streaming y de «gaming». Este nicho está presto a efectuar compras apoyándose en el m-commerce (también conocido como comercio móvil).
A esto se suma que jóvenes nacidos entre 1990 y 2000 están dispuestos a invertir en marcas de lujo. Así, impulsado en buena parte por los «zillennials», el mercado del lujo crecería un 21% en 2023. De acuerdo con la consultora Bain & Company, los consumidores jóvenes se están iniciando en el universo del lujo entre tres y cinco años antes que las generaciones precedentes.
De hecho, los millennials y la Generación Z constituirán el 70% de los consumidores de lujo en 2025. En 2019 este porcentaje era de apenas el 44%.