Silveria Pari es prueba tangible de lo que una marca puede lograr a través de su propósito. Hoy las empresas no sólo venden productos y servicios, generan bienestar a la sociedad, y Teoma se suma a esta tendencia en el mercado actual.
La historia de Silveria Guillermina Pari Machaca es una enseñanza y es que sus logros alcanzados de la mano de Teoma, demuestran el poder de las marcas, cuando se conjugan con el liderazgo y voluntad de sus colaboradores. Esta anécdota muestra cómo el propósito de una empresa se convierte en un bienestar tangible para la sociedad en general.
¿Quién es Silveria Guillermina Pari?
Silveria Guillermina Pari Machaca nació el 19 de enero de 1956, en uno de los lugares más inhóspitos de Perú, un caserío de San Antonio de Putina en la provincia de Puno. Una localidad situada a casi 4 mil metros sobre el nivel del mar, donde vivió junto a sus abuelos maternos hasta los 14 años, edad en la que decidió emprender un largo viaje en búsqueda de su madre.
Luego de una larga travesía, Silveria se encontró con una nueva familia y fue entregada a un hombre desconocido, que pronto se volvió el padre del primero de sus nueve hijos -dos murieron de bebés y otro en su temprana adolescencia-. Este difícil panorama la acompañó durante 50 años de sacrificios y esfuerzos.
Pero, ¿cómo Teoma cambia la vida de esta incansable peruana? Dueña de un hambre que no la abandonó durante largos años, pero de un amor gigantesco por sus hijos, Silveria trabajó en todo lo imaginable. “Yo vivía de mate y pan en el desayuno, chicha y pan en el almuerzo y mate en la nochecita. Si tenía suerte, una que otra vez mis amigos me invitaban una comida”, cuenta ella, al explicar que todos los alimentos a los que podía acceder se los daba a sus hijos.

Años más tarde, y luego de múltiples enfermedades ocasionadas por su mala alimentación, Silveria fue diagnosticada con un tumor en el riñón y un quiste en el hígado, recibiendo los peores pronósticos. Aquí es donde la realidad de Pari Machaca se cruza con los esfuerzos de Teoma, justo cuando su nuera le informó sobre unos productos que podrían ayudarla a mejorar su condición de salud, estos eran Ph Moringa, Aloe-T Pro Piña y Clorofila-T.
De esta manera, Silveria se convirtió en un importante cliente de la firma, llevándola a concretar su afiliación a la red de Teoma para obtener más beneficios como consumidora. Sin embargo, sus logros comienzan tras un fortuito encuentro con sus amigas, que al ver la recuperación de Pari Machaca, deciden probar los productos de Teoma, gracias a su recomendación, y afiliarse a la red de la firma.

Así comenzó su red de mercadeo, la cual la coloca hoy como una vendedora del rango Oro Estrella, que conduce un auto de lujo y sigue luchando para escalar hacia sus sueños. Silveria se ha convertido en vendedora de Teoma y afiliadora de cada vez más personas a las redes de mercadeo de la multinacional nacida en Lima y conocida en toda América Latina y varios estados de Norteamérica.
Es así como Teoma, transforma su propósito en bienestar para las personas. Silveria llegó sin haber tenido ningún tipo de preparación académica y sin saber leer ni escribir, fue capaz de sacar su líder interna y armó un equipo tan luchador como ella. Hoy su familia Teoma, está conformada por personas con historias y sueños diferentes, pero con una meta en común: trabajar por un futuro mejor.
Escribe: Viviana Rodriguez