Según José César Perales, experto en psicología, los ciudadanos de este país incrementaron en un 27,8% el dinero destinado a las apuestas deportivas, superando los 120 mil millones de dólares en el 2023.
Las casas de apuestas están encontrando un nicho en el deporte estadounidense, con presencia creciente en eventos como la NBA y la NFL. En 2023, los estadounidenses gastaron un 27,8% más en apuestas deportivas, superando los 120 mil millones de dólares, según la Asociación Americana del Juego. Este auge ocurre incluso en estados donde las apuestas son ilegales, lo que algunos expertos consideran un problema de salud pública.
El aumento en las apuestas está relacionado con un incremento en los problemas de ludopatía. En Ohio, por ejemplo, las llamadas de auxilio a centros de ayuda crecieron un 55%. Los jóvenes, cada vez más expuestos a las apuestas, son los más afectados. Unai Garma, que empezó a apostar a los 15 años, ahora advierte sobre los peligros de esta adicción a través de su proyecto A90Grados.
Los videojuegos también contribuyen a la normalización del juego, con características como las cajas botín que se asemejan a los juegos de azar. Según el psicólogo José César Perales, la exposición temprana a estos elementos puede aumentar el riesgo de desarrollar ludopatía.
La industria utiliza estrategias agresivas para atraer apostadores, como la publicidad en vivo durante eventos deportivos y acuerdos con jugadores para promover apuestas. A pesar de las críticas, las apuestas deportivas siguen en auge, y expertos y afectados llaman a buscar ayuda y regular la publicidad dirigida a personas con adicción.