La iniciativa se inspira en la atleta, poeta y activista Asma Elbadawi, quien cambió el juego para las mujeres cuando anuló con éxito en el 2014 la prohibición sobre el uso de sombreros religiosos en el baloncesto profesional.
El fabricante de indumentaria deportiva ha decidido celebrar el último capítulo de su campaña Impossible Is Nothing en Dubái, a través del cual construyó una cancha de baloncesto a 250 m sobre Dubái para su nueva activación bautizada I’m Possible.
A través de esta campaña, creada por Havas Middle East, Adidas quiere reforzar su actitud de marca, subrayando cómo el deporte nos permite alcanzar nuestras ambiciones es por eso que ha decidido rendir homenaje a uno de los iconos del deporte de la esfera local.
Una historia inspiradora
Entre sus atractivos, la cancha I’m Possible presenta una ilustración de la jugadora de baloncesto, poeta y activista sudanesa-británica Asma Elbadawi en un intento por inspirar un campo de juego más inclusivo.
Cabe destacar que Asma cambió el juego para las mujeres en el deporte cuando anuló con éxito en 2014 la prohibición de la Federación Internacional de Baloncesto (FIBA) sobre el uso de sombreros religiosos en el baloncesto profesional.

De esta forma la atleta se ha convertido en una representación de toda una generación de atletas comprometidos con labrarse nuevos caminos y crear un mañana mejor para ellos y las generaciones venideras.
“Cuando quisimos acabar con la prohibición de jugar con hiyab, dijeron imposible. Pero como en esta ciudad, cada vez que me dicen que es imposible, todo lo que escucho es que soy posible”, asegura Asma Elbadawi, jugadora de baloncesto, poeta y activista-
Una acción que desafía los límites
Asimismo, con el horizonte de la ciudad de fondo, la cancha de baloncesto que brilla en la oscuridad, palpita en lo alto de una torre de 52 pisos en el corazón de la icónica isla artificial, The Palm. Construido con cientos de luces ultravioletas negras, paneles LED y pintura que brilla en la oscuridad, la construcción tomó alrededor de 100 horas de trabajo en el suelo.
Para dar una escala completa de la hazaña y mostrar la palma de la mano completa, se filmó una película desde un helicóptero a más de 1.524 m sobre el suelo.
La marca continúa apoyando a todos los atletas que son fuerzas impulsoras hacia la igualdad de género y están rompiendo barreras tanto dentro como fuera del mundo del deporte.
“Esta campaña solo podría haber ocurrido en una ciudad como Dubái, que constantemente desafía los límites y simboliza posibilidades, valores compartidos tanto por adidas como por Asma”, asegura Paul O’Connor, director de comunicaciones de marca y marketing deportivo.