Las empresas que invierten en deportistas no solo obtienen un retorno en visibilidad, sino también una asociación emocional auténtica con los consumidores, por lo que pueden construir desde ahora un proyecto con visión a mediano plazo, sumándose a su proceso de preparación.
En 2027, Perú volverá a ser el centro del deporte continental con la realización de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos en Lima. En ese sentido, esta nueva edición representa no solo una gran fiesta deportiva, sino también una plataforma excepcional para que marcas locales e internacionales se involucren con historias de superación, orgullo nacional y éxito.
Si bien existen distintas formas de vincularse con Lima 2027, la única que tiene voz propia con testimonios increíbles es a través de los atletas. Precisamente, la capital recibirá a más de 7.000 atletas provenientes de 41 países de América por el certamen, movilizando inversiones, transformando la ciudad, inspirando a millones y generando un legado duradero.
Lima 2027: el evento más importante de la región
En 2019, Lima demostró estar a la altura del desafío: los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos de aquel año fueron considerados los mejores de la historia, según Panam Sports. Como balance, tuvo la participación de más de 6.600 atletas, así como la construcción de modernos recintos deportivos como la nueva VIDENA, que incluyó al parque acuático, el velódromo, el estadio de atletismo, entre otros, el polideportivo del Callao o el skatepark y pista de bmx de la Costa Verde.
Asimismo, el evento aportó significativamente al Producto Bruto Interno (PBI) del Perú y su impacto económico fue estimado en más de 1.000 millones de dólares. Esto forjó un vínculo entre los peruanos y los deportistas que representan al país en disciplinas deportivas que muchos ciudadanos ni siquiera sabían que existían.
Los logros peruanos en Lima 2019
A nivel deportivo, Perú vivió una de sus mejores participaciones en la historia, logrando un total de 41 medallas en los Juegos Panamericanos: 11 de oro, 7 de plata y 23 de bronce. Nombres como Gladys Tejeda y Cristhian Pacheco, ganadores en maratón, brillaron ante miles de compatriotas.
Por otro lado, en disciplinas como el karate, el surf y la marcha atlética también se lograron históricos podios. Talentosos deportistas peruanos, como Alexandra Grande, Lucca Mesinas, Piccolo Clemente y nuestra hoy bicampeona mundial Kimberly García, fueron reconocidos.
En los Juegos Parapanamericanos, Perú alcanzó 15 medallas, siendo cinco de ellas de oro. Figuras como Pilar Jáuregui (bádminton) y Rosbil Guillén (atletismo) mostraron el potencial enorme del equipo paralímpico nacional, cuando este cuenta con el apoyo necesario.
No obstante, los retos de cara a Lima 2027 son mayores, pues los atletas necesitarán más preparación, roce internacional, recursos, equipo técnico y acompañamiento psicológico. Entonces, allí es donde las marcas jugarán un rol transformador que será clave.

El rol transformador de las marcas
El patrocinio deportivo ya no es solo una cuestión de visibilidad en camisetas o estadios. Actualmente, representa una forma poderosa de conectar con el público, por medio de valores como la disciplina, la perseverancia, el esfuerzo y el orgullo de pertenencia.
¿Por qué? Porque apoyar a un atleta significa ser parte de su historia de crecimiento personal y deportivo. Es decir, significa estar presente en sus entrenamientos, acompañarlo en su progreso, celebrar sus victorias y aprender de sus derrotas, que no son más que aprendizajes para alcanzar las metas propuestas.
Bajo ese panorama, las marcas que invierten en deporte no solo obtienen un retorno en visibilidad, sino también una asociación emocional auténtica con los consumidores. Por eso, Lima 2027 ofrece una oportunidad única: construir desde ahora un proyecto con visión a mediano plazo y las empresas pueden sumarse al proceso de preparación de los deportistas desde este año.
“En un entorno donde los consumidores buscan marcas con propósito, apoyar al deporte nacional es una oportunidad estratégica. No se trata solo de patrocinio, se trata de liderazgo, visión de país y un legado social compartido”, destaca Julio Medina, cofundador de la agencia INYOGO.
¿Cómo fue el apoyo durante Lima 2019?
En la edición anterior, varias marcas apostaron por el deporte y fueron parte del éxito. Toyota fue uno de los patrocinadores principales, proveyendo vehículos híbridos para la logística del evento y asociando su marca con la sostenibilidad y la movilidad eficiente. Además, formó un equipo con cinco medallistas.
Empresas como Pluspetrol, Wong, Metro, Kia y Petroperú también se sumaron como auspiciadores de atletas y/o de las competencias, siendo parte de las empresas que estuvieron detrás de más de 10 medallistas. Pluspetrol, por ejemplo, patrocinó a figuras como Pilar Jáuregui (parabádminton) y Dunia Felices (paranatación) así como a Zoila La Rosa (voléy) y Yuri Labra (atletismo). Dichas deportistas destacaron por su desempeño y por el impacto positivo que generaron entre sus compatriotas.

Gracias al respaldo de estas marcas, muchos atletas pudieron acceder a entrenadores, equipos y competencias internacionales. El apoyo no fue improvisado y detrás hubo planificación, gestión y estrategia.
“El éxito deportivo peruano en 2019 fue amplificado por marcas que supieron contar historias humanas. Las marcas que inviertan en atletas ahora tendrán tres años para construir una narrativa emocional, auténtica y ganadora que conecte profundamente con millones de peruanos”, explica David Ruiz, también cofundador de INYOGO.
INYOGO: el aliado detrás de las historias de éxito
La mayoría de los equipos de embajadores y las activaciones entre marcas y atletas en Lima 2019 fueron posibles gracias a INYOGO, agencia líder del marketing deportivo en el país que entiende el ecosistema deportivo local como nadie. La compañía fue el puente entre empresas y deportistas, identificando el talento, desarrollando campañas personalizadas, gestionando derechos de imagen, organizando eventos y activaciones, y generando contenido de alto impacto.
Su experiencia permitió que tanto marcas como atletas obtuvieran el máximo valor de estas alianzas. La agencia trabajó con equipos de embajadores deportivos para varias marcas, entre las que destacaron Toyota, Pluspetrol, Wong y Metro. En total, INYOGO logró concretar el apoyo a 14 deportistas, tanto atletas como paratletas, quienes lograron obtener importantes medallas para el team Perú.
Como vemos, el marketing deportivo requiere conocimiento, sensibilidad y una red de contactos que solo se obtiene con años de experiencia. De acuerdo a los objetivos planteados, una agencia especializada garantiza:
- Selección de atletas adecuados según los valores y objetivos de cada marca.
- Negociación y manejo de contratos, derechos de imagen y seguimiento legal.
- Planificación de campañas 360°: online, offline, activaciones y contenido.
- Medición de impacto y retorno.
Sin una estrategia clara y una ejecución profesional, los esfuerzos de patrocinio pueden quedar dispersos, sin generar un impacto real en la audiencia ni en el desarrollo del deportista. “Contar con una agencia especializada como INYOGO permite que la estrategia no se quede solo en la teoría. Los resultados pasados demuestran que una buena ejecución hace la diferencia entre simplemente ‘estar’ y realmente ‘impactar’. Las marcas necesitan ese nivel de acompañamiento si quieren marcar un antes y un después en Lima 2027”, comenta Medina.
Talento joven con potencial de medalla
Perú cuenta con una nueva generación de atletas que se preparan para brillar en Lima 2027. En atletismo, surf, judo, ciclismo, bádminton y natación ya se vislumbran nombres con proyección continental. En el paradeporte, el talento es igualmente prometedor y requiere apoyo desde las etapas formativas.
Estos jóvenes representan un gran proyecto deportivo para el país y brindan a las marcas una excelente oportunidad de acompañarlos desde ahora y así construir juntos una historia de esfuerzo y victoria. “Formar un equipo de atletas rumbo a Lima 2027 no solo permite visibilidad sostenida, sino que construye una narrativa inspiradora alrededor del compromiso de la marca con el deporte nacional. Acompañar el crecimiento de estos deportistas convierte a las empresas en protagonistas de historias reales que emocionan y generan conexión auténtica con el público”, acota Ruiz.