Aunque la empresa fue fundada por tres hermanos, dos de ellos se alejaron con el tiempo, por lo que el éxito de la misma recayó en los hombros de Tomás Bata.
Tomás, Anna y Antonín Baťa conformaban la octava generación de zapateros de la familia Bata, en la ciudad rural de Zlín, Checoslovaquia. Tras reunir una pequeña herencia de su madre, establecieron el T. & A. Bata Shoe Company en 1894.
Un año después, la empresa acumulaba una deuda de más de 8,000 florines (cerca de 17,633 soles) y se enfrentaba a la quiebra, a esto se sumó que Antonín fue reclutado para unirse al ejército. Bata, que en ese entonces contaba con 50 empleados, se escapó de la bancarrota gracias al liderazgo de Tomás.
En 1897, cuando la revolución industrial ya se había extendido por toda Europa, introdujeron técnicas de producción mecanizadas en la industria de calzado, incluidas las primeras máquinas de fabricación de zapatos impulsadas por vapor. Así empezó un período de modernización que le permitió a la empresa convertirse en uno de los primeros productores de calzado en masa de Europa.
En este tiempo también apareció el Batovka, un zapato que destacó por su simplicidad, estilo y peso ligero. Su combinación de cuero y lona en un tiempo en el que los zapatos solo eran hechos con cuero, le permitió a los Bata despegar.
Los primeros años
En 1898, Anna Bata, quién acababa de casarse, dejó la empresa. Diez años después, Antonín murió, por lo que Tomás se convirtió en el único dueño de la empresa.
Durante las primeras décadas del siglo XX, e incluso en la Guerra Mundial y Gran Depresión, Bata continuó prosperando. En 1905, por ejemplo, ya se producían 2200 pares de zapatos por día, lo que convirtió a la empresa de calzado en la más grande de Europa.
Tras el estallido de la Primera Guerra Mundial, la producción tuvo que reducirse. Tomás Bata tomó la decisión de reducir a la mitad el precio de sus zapatos y este movimiento fue lo que les generó mayores ventas e incluso les permitió expandirse a otros países.
En 1924, la empresa ya contaba con 112 sucursales en todo el mundo.
Después de ser alcalde de Zlín y haber expandido la empresa a otros mercados, Tomás Bata falleció el 12 de julio de 1932 cuando su avión privado se estrelló cerca del complejo de su propia fábrica. Tomas Jr. heredó la mayoría del negocio de Bata y estableció el holding Bata Shoe Organisation.
En 1936, llegó la edad de oro de Bata gracias a unas sencillas zapatillas. Este calzado fue creado para escolares indios, pero sus rayas finas y la puntera de goma las convirtieron en uno de los zapatos más vendidos de todos los tiempos.
Así fue como a lo largo de más de 100 años, Bata se ha convertido en un referente de la industria de calzado en el mundo. En la actualidad mantiene cerca de 5 mil localidades y atiende a más de un millón de clientes al día.
Algunos datos
– Bata es reconocida en 2004 por Guinness World Records como el fabricante y minorista de calzado más grande del mundo.
– El jugador de basket del salón de la fama Earvin «Magic» Johnson inició su carrera usando zapatos Wilson by Bata.
La Escuela de Posgrado de la Universidad Continental desarrollará una conferencia este martes 29 de noviembre a las 06:30 pm, donde se abordarán las claves para convertir un equipo disfuncional en uno cohesionado y de alto rendimiento.