La marca acaba de estrenar la segunda parte de su campaña Real Virtual Beauty, bajo el nombre Cinthia’s battle, con el objetivo de reivindicar una mejor representación de las mujeres en los videojuegos.
En un esfuerzo por desafiar los estándares de belleza tradicionales y promover una imagen corporal positiva, la conocida marca de productos de cuidado personal, Dove, ha decidido lanzar la segunda parte de su campaña “Real Virtual Beauty”, bajo el nombre Cinthia’s battle, que busca aumentar la representación y la diversidad en los videojuegos para mujeres y niñas.
Esta iniciativa tiene como objetivo acabar con los estereotipos de belleza y brindarles las herramientas necesarias a los jóvenes creadores para fomentar la autoestima y confianza en la apariencia física.
Como parte de la campaña, y en colaboración con la agencia LOLA MullenLowe, la marca decidió mostrar la vida de un personaje de videojuego que, tras eliminar a un alienígena, se dirige entre bastidores a su vestuario. Al llegar ahí, se mira al espejo y muestra su incomodidad tras ver que su aspecto está excesivamente sexualizado.
Este cortometraje está basado en la historia real de Cinthia, quien forma parte de las cuatro protagonistas del proyecto de Dove que convierte en avatares 3D a sus embajadoras.
De acuerdo con Dove, esta representación se basa en un estudio realizado en conjunto con la empresa Women Games, quien asegura que el 60% de las chicas jóvenes y el 62% de las mujeres adultas no se sienten bien representadas en los juegos. Además, un 74% de las encuestadas afirmaron que les gustaría que los videojuegos fuesen más inclusivos.
«Queremos marcar el camino para transformar los videojuegos en un lugar positivo para mujeres y niñas. Juntos podemos ayudar a las niñas con las herramientas necesarias para fortalecer la autoestima, y garantizar que el mundo virtual sea un lugar diverso e inclusivo para todos», manifestó la marca Dove en un comunicado.
Al dar vida a personajes femeninos reales, la marca desafía los estándares convencionales y promueve una imagen corporal positiva. Este es un paso crucial para lograr una mayor diversidad y aceptación en la industria del entretenimiento y para fomentar una sociedad más inclusiva y respetuosa.