La firma de consultoría LLYC reveló en su más reciente informe que los consumidores no solo están reduciendo sus gastos, están un 89% más abiertos a hablar de esto, por lo que los especialistas ofrecen algunas estrategias para hacer frente a este escenario.
Un informe de la consultora McKinsey asegura que el aumento de los precios es la mayor preocupación para dos tercios de los consumidores de Reino Unido. El problema para las marcas es que esta situación está impactando en los hábitos de compra, el 70% de los consultados afirma que ya está poniendo en práctica nuevos hábitos de compra y están abiertos a pagar por productos más ajustados a su bolsillo.
En el escenario peruano la dinámica del mercado no es muy diferente, el 30% de las familias asegura haber migrado a productos más económicos como respuesta a la reducción de sus ingresos durante la crisis sanitaria. Un escenario que no parece tener intenciones de retroceder en un futuro próximo.
Menor poder adquisitivo entre los peruanos
De acuerdo con el especialista Victor Fuentes, economista jefe del Instituto Peruano de Economía (IPE), las cifras del empleo en Lima Metropolitana, al cierre del 2022, han registrado una recuperación en comparación con los niveles prepandemia, aunque con condiciones más precarias.
En promedio, en el 2022, el número de horas trabajadas experimentó un crecimiento con respecto al 2019. No obstante, el salario del mercado en general cerró por debajo de dicho nivel.
Un escenario que, sumado al registro de la inflación acumulada entre el 2021 y 2022 tuvo tasas bastantes altas, terminó impactando en la capacidad adquisitiva de las personas: el poder de compra de los limeños se redujo en alrededor de S/270 mensuales.
La reducción del poder adquisitivo es un problema que trasciende fronteras. Aún así, según la firma de consultoría LLYC. Los consumidores han mostrado cada vez más interés, y han conversado más, acerca de la “reducción del gasto” (un 89% más). Es por ello que los especialistas están dando recomendaciones para hacer frente a este escenario.
¿Cómo deben prepararse las marcas ante un consumidor con menor poder adquisitivo?
LLYC dio a conocer recientemente el informe ‘New Times, New Rules: 10 desafíos para tiempos impredecibles’. Donde busca dar respuesta para aquellos retos que enfrentan las marcas ante los cambios del mercado actual. Entre sus insights abordaron cómo hacer frente a un escenario protagonizado por un consumidor con menor poder adquisitivo
Es así como la firma de consultoría señala que con un consumidor nervioso será clave generar estrategias que se basen en los datos y abordar con creatividad los componentes del modelo de negocio poniendo al usuario como centro de todo.
Por supuesto, contando con aliados (proveedores) que puedan ayudar a hacer ese camino más fácil de recorrer. Con una propuesta de valor específica, y que ayuden a llevar a cabo las soluciones de manera más concreta y eficaz.
“Este 2023 será vital comprender correctamente el journey de nuestro comprador y ser muy relevantes en cada uno de sus pasos. Para ayudar a las empresas a desarrollar este proceso, se deben crear equipos específicos para cada tipo de cliente, que hagan un correcto uso de los datos y empleen plataformas de proyecto que permiten el control pasivo de este o los planes de desarrollo del cliente”, puntualiza el informe.