El sitio para compartir música y videos tuvo gran relevancia durante la década del 2000 hasta que enfrentó demandas por infracciones de derechos de autor y cerró. Sin embargo, en el 2022 la compañía se reinventó con nuevos dueños, quienes le dieron un giro de 180 grados a la propuesta y recientemente han comprado la marca del Fyre Festival.
LimeWire nació a principios de la década de 2000 como un sitio de intercambio de archivos peer-to-peer (P2P) basado en la red Gnutella. La primera versión pública fue lanzada el 3 de mayo del 2000 y fue rápidamente adoptado por millones de usuarios por su simplicidad para buscar y descargar música, vídeos y software.
El auge de la compañía fue entre los años 2003 y 2008, volviéndose una de las aplicaciones P2P más populares del planeta. De hecho, por ese entonces, se estimaba que contaba con decenas de millones de usuarios activos.
No obstante, las críticas desde la industria musical no tardaron y la Recording Industry Association of America (RIAA) junto a grandes sellos discográficos señalaron que la mayor parte del tráfico en LimeWire consistía en material con derechos de autor distribuido sin licencia. Como consecuencia, la empresa enfrentó problemas legales y tuvo uno de los casos judiciales más fuertes contra Arista Records LLC.
Cierre forzozo
Sobre esa demanda, en mayo de 2010 la corte del distrito sur de Nueva York dictaminó que LimeWire había inducido a la infracción de derechos de autor y otorgó un fallo favorable a los demandantes. Dicho fallo fue un punto de inflexión legal que combinó análisis de conducta de la compañía y pruebas sobre el uso mayoritario del software para descargar obras protegidas.
Asimismo, el tribunal emitió una orden judicial permanente que exigía a LimeWire deshabilitar las funciones de búsqueda, descarga y compartición de obras sonoras. Esto prácticamente significó el cierre operativo de la web y del servicio tal como se conocía hasta entonces.
Tras ello, la marca LimeWire quedó prácticamente inerte durante años, pero su nombre siguió siendo sinónimo de la era del intercambio P2P. Con el cambio de la industria hacia servicios de streaming (Spotify, Apple Music, etc.) y modelos de negocio basados en suscripciones, el skyline digital que había favorecido la descarga directa se transformó profundamente y volvió obsoleto a LimeWire.

Relanzamiento con otro modelo de negocio
En 2022, LimeWire fue relanzada por nuevos propietarios como una plataforma orientada al ecosistema Web3, dentro del mercado de NFTs y experiencias digitales relacionadas con la música. Así transformó por completo su modelo de negocio, dando un giro de 180 grados como un proyecto alojado en Algorand Chain para que los creadores de contenido, artistas y marcas creen una comunidad basada en suscripción solo para miembros.
Esto representa un acuerdo rentable para creadores y suscriptores, donde los primeros tienen el 100% del control de su contenido. De esa manera, pueden distribuir contenido basado en video, audio, fotos y texto a su comunidad de suscriptores.
Su última integración de AI Studio lo convierte en una plataforma de creación de contenido. Allí los usuarios pueden crear imágenes, música y videos generados por IA y luego publicar en LimeWire para recibir hasta el 90% de todos los ingresos publicitarios.
Recientemente, LimeWire adquirió la marca Fyre Festival por aproximadamente $230.000, ocho años después del desastroso intento original de organizar el evento. Esto pone de nuevo en el radar a la compañía que, si bien es recordada por su propuesta de inicios del milenio, actualmente sigue otra línea comercial.
