Carlsberg no tuvo mejor idea para exhortar a las personas al consumo responsable que crear una botella de apenas 12 milímetros de altura y con una capacidad de 0,005 centilitros.
Beber cerveza es casi un requisito fundamental para quienes asisten a algún evento social. Sin embargo, hacerlo sin moderación puede provocar que las personas pierdan la conciencia, contraigan enfermedades, sufran accidentes o (en ciertos casos) hasta transformar un momento de diversión en un escenario de violencia.
Cabe resaltar que esta, además, es una de las bebidas de su tipo más consumidas en el mundo. Según datos de Oxford Economics y la firma de investigación de mercado de bebidas alcohólicas IWSR, la cerveza representó el 75,2 % del volumen total de bebidas alcohólicas vendidas en el año 2022.
En ese sentido y para fomentar el consumo responsable de alcohol, Carlsberg, marca de cerveza de origen danés, ha optado por crear un curioso producto. Y es que reclutó al artista de miniaturas Åsa Strand para que diseñe una botella única en el mundo: su tamaño es de 12 milímetros y su capacidad de 0,005 centilitros.
Una réplica insólita para concientizar
Aunque a simple vista aparenta ser irreal o producto de la inteligencia artificial, es un artículo 100% real y artesanal. Este retrata a la perfección las botellas de la firma con detalles bastante similares como la tapa, su etiqueta y hasta el color, pero en una inusual presentación (comparable a un grano de arroz).
“Nuestro equipo en Carlsberg Sweden ha creado la cerveza más pequeña del mundo, de apenas 12 milímetros de altura, un recordatorio creativo de lo que representamos: responsabilidad, curiosidad y colaboración.”, comentó en LinkedIn, Juliana Dundarova, Group Head of Employer Branding de la marca.
Fuente: trendhunter.com










