Durante el último año, el sector minorista en Estados Unidos experimentó una marcada disminución en la actividad, lo que llevó a numerosas cadenas a cerrar locales que no lograban cumplir con las expectativas.
En 2024, diversos factores como la inflación y cambios en las tendencias de consumo llevaron a al menos 10 empresas a declararse en quiebra, afectando directamente a 14,000 empleos, según la firma especializada en recolocación laboral Challenge, Gray & Christmas,
Del mismo modo, la firma CoreSight recoge que, hasta noviembre de 2024, más de 7,100 tiendas cerraron en Estados Unidos, un 69 % más que el año anterior. Asimismo, 45 minoristas declararon bancarrota este año, frente a las 25 registradas en 2023, evidenciando un panorama cada vez más complicado para el comercio minorista.
La incapacidad de muchas empresas para adaptarse a un mercado digitalizado y altamente competitivo ha acelerado esta tendencia. Modelos de negocio tradicionales, aunque de larga trayectoria, han quedado rezagados ante las nuevas exigencias del consumidor. Estas circunstancias han afectado no solo a minoristas, sino también a cadenas de restaurantes y servicios.
Cabe resaltar que, durante el 2024, 26 cadenas de restaurantes solicitaron protección por bancarrota bajo el Capítulo 11, casi triplicando las cifras de 2020, en plena pandemia. Las cadenas de comida casual, superadas por el auge de opciones rápidas y convenientes, han perdido relevancia en un mercado en constante evolución.
En ese contexto, presentamos las 10 empresas más reconocidas que se declararon en bancarrota este 2024:
- Big Lots
La tienda de descuentos cerró sus 963 establecimientos restantes tras declararse en bancarrota en septiembre de 2024, luego de advertir sobre «dudas sustanciales» acerca de su viabilidad. - Bowflex
El fabricante de equipos de gimnasio para el hogar quebró en marzo, pero logró vender la mayoría de sus activos por $37.5 millones a una empresa taiwanesa. - Joann
Tras 81 años, el minorista de telas y manualidades se declaró en quiebra en marzo, convirtiéndose en una empresa privada para reducir deuda y mantener operativas sus 850 tiendas. - Party City
La tienda de artículos para fiestas quebró en diciembre por segunda vez en dos años y cerrará 700 locales a principios de 2025. - Red Lobster
La cadena de restaurantes de mariscos quebró en mayo, cerrando más de 100 locales debido a problemas de marketing, calidad y servicio. - Spirit Airlines
La aerolínea de bajo costo se declaró en bancarrota en noviembre, afectada por pérdidas crecientes, deuda elevada y competencia intensa. - Stoli
La marca de vodka enfrentó un ciberataque que paralizó operaciones, sumado a restricciones de importaciones rusas y menor demanda. - TGI Fridays
La cadena sufrió una caída en clientes y los efectos prolongados de la pandemia, lo que la llevó al borde de la quiebra. - True Value
La ferretería quebró en octubre tras 75 años, afectada por la falta de liquidez y un mercado inmobiliario estancado. - Tupperware
La icónica marca de recipientes plásticos se declaró en bancarrota en septiembre por problemas financieros y una fuerte caída en ventas.