La acción de marketing inverso transforma el logo de la compañía en una llamada de atención visual.
La compañía financiera sorprendió hace unos días con una curiosa acción que cambió las letras de su logo por asteriscos. La propuesta, con lugar en una de sus oficinas más visibles de Madrid, se realizó para dar visibilidad a la importancia de la ciberseguridad.
Ideada por el equipo interno de marketing del banco y desarrollada el 1 de mayo con motivo del Día Mundial de la Contraseña, la propuesta ha convertido un icono corporativo – parte de la identidad del banco- en una llamada de atención visual.
Esta es una acción de marketing negativo (también denominado marketing inverso), enfocado en concientizar a la población madrileña sobre la ciberseguridad, la privacidad y la protección de datos de una forma visual y notoria.
“Es una forma de demostrar que incluso una marca tan reconocida como la nuestra debe cuidar lo más básico, su identidad. Y eso empieza por una contraseña segura”, aseguran desde la compañía en un comunicado. El objetivo es concienciar a la población de la importancia de establecer contraseñas seguras en una vida cada vwz más digital.
Con esta iniciativa, que es parte de una campaña más amplia que combina activación urbana, contenido audiovisual y amplificación digital, Banco Santander pretende reforzar su posición como una marca comprometida con la innovación y la seguridad digital de sus clientes.