«Keep it Oscar» es el nombre de la campaña global que busca renovar la imagen de la marca que suma 138 años de historia. Te contamos sobre el concepto y te mostramos algunas piezas en esta nota.
Oscar Mayer, la histórica marca de embutidos con 138 años de edad, propiedad de Kraft Heinz, está implementando por primera vez en su historia una amplia revisión de la marca que enfatiza la unidad y la diversión, con claras reminiscencias al Pop-Art, con el fin de acercarse a nuevas generaciones de consumidores.
La medida incluye una reelaboración del logotipo y de su packaging. Todo está enmarcado en un campaña llamada «Keep it Oscar», trabajada por creativos de la agencia de branding Brand Opus.

Con la acción, la marca promueve los cambios a través de recursos experimentales como GIF especialmente diseñados para ver en dispositivos móviles y anuncios de cinco segundos para redes sociales y televisión..
Con la modernización de su imagen, Oscar Mayer busca atraer a una base de consumidores más amplia así como brindar un sentido más fuerte de cohesión y modernidad que dé cuenta de su solidez empresarial.
«La creatividad en sí está más centrada en comunicar una vibra que en contar una historia tradicional», valora la revista especializada Marketing Dive.
Es así como, por ejemplo, el anuncio titulado «Laser Eyes», que se publica en versiones de cinco y 15 segundos, muestra a un niño pequeño levitando y cocinando una salchicha de Oscar Mayer usando superpoderes. Otro anuncio, «Dancing Bacon», describe exactamente lo que implica su título, unas tocinetas bailando, y así sucesivamente pueden verse en YouTube una seguidilla de una decena de minimetrajes que si bien no tienen ningún elemento en común que los unifique, dan a conocer una personalidad de marca.
«Para su primera revisión en 138 años, nuestra tarea fue brindar más significado y relevancia a nivel de masterbrand, uniendo todos sus productos, desde tocino y salchicas hasta carnes frías, bajo una narrativa sólida que es en voz alta y orgullosa Oscar Mayer. Oscar Mayer siempre se ha tomado su carne en serio, pero no a sí misma. Así que creamos una narrativa distintiva que, al igual que su logotipo, nunca es cuadrada. Celebrar el icónico logo romboide con un diseño audaz y limpio ejemplifica el enfoque de la marca hacia las carnes con una estética igualmente sencilla», dicen desde Brand Opus sobre el trabajo realizado.