El colapso del futbolista fue noticia a nivel mundial. Visto en perspectiva, el comportamiento del capitán de su equipo, Simon Kjaer, fue ejemplo de liderazgo y da lecciones que sirven a cualquier sector. Te contamos aquí.
El pasado sábado fue noticia mundial el accidente del futbolista danés Christian Eriksen, quien se desplomó durante un partido de la Eurocopa debido a un paro cardíaco.
La dramática situación paralizó la realización del juego entre Finlandia y Dinamarca en el minuto 43. La gravedad de la situación no se supo sino un poco después. De hecho, el médico de la selección danesa, Morten Boesen, aseguró que el futbolista del Inter de Milán «estuvo muerto antes de ser reanimado».
Y de entre todas las historias que han proliferado a partir del episodio, una especialmente inspiradora es la del comportamiento del capitán de la selección de Dinamarca, Simon Kjaer, y cómo su actuación fue vital para resguardar la vida y la dignidad de Eriksen.
Uno a uno, los puntos a resaltar fueron desglosados por Germán Elera, influencer peruano en LinkedIn, experto en transformación digital. Resumió la labor de Kjaer en cuatro momentos que pueden trasladarse a cualquier espacio fuera de la cancha para mostrar liderazgo sólido y empático. Son:
1.- Acudió de inmediato al jugador, lo puso en posición de recuperación y le impidió tragarse la lengua.
Esta acción habla de cómo un líder real siempre da de primero un paso al frente cuando hay un problema y cómo siempre se acerca a quien lo necesita dentro de su equipo para colocarse en la total disposición de ayudar.
2.- Luego hizo una señal para que se le diera más personal médico después de que los primeros en responder llegaron al lugar.
El líder verdadero busca ayuda calificada siempre que es necesario para solventar los problemas del equipo y lo hace rápido.
3.- Al notar que las cámaras de televisión seguían grabando, organizó a sus jugadores para crear una barrera alrededor del jugador, dándole a él y al personal que trabaja para salvar su vida el respeto que merecen.
El líder real resguarda siempre la dignidad de su equipo y para eso involucra a todos.
4.- Cuando la novia de Eriksen llegó al campo, inmediatamente corrió hacia ella y la consoló.
El líder hace control de daños y para eso se relaciona con el entorno y asume responsabilidades.
«Se he dicho varias veces aquí antes; el liderazgo sin servicio, no sirve.
Si no tienes un Simon Kjaer en tu equipo, ¡ve y consigue uno! PD: Si no tiene un DEA (desfibrilador externo automático) en tu oficina o en tu proyecto, presiona a tus líderes para que lo consigan. Son fáciles de usar y, lo más importante, salvan vidas», concluyó Elera.