Un estudio reveló la alarmante cifra, una que, según los especialistas, corresponde a un negocio que produce mucho más que grandes compañías como Nike, McDonald’s o cualquier otra.
La Asociación Nacional de Anunciantes (ANA) de Estados Unidos reveló un informe en el cual señala que el fraude publicitario será de US$120.000 millones para este año. Así lo señaló Bob Hoffman, especialista al frente de AdContrarian, uno de los blogs más influyentes de marketing y publicidad según Business Insider.
“Llevo años diciendo que el fraude publicitario es mucho mayor de lo que se sabe. Este informe confirmó mi creencia”, aseguró el experto en una publicación. Asimismo, argumentó que “si la estimación de fraude publicitario de ANA es correcta, sería un negocio mayor que Coca-Cola, McDonald’s, PepsiCo, Nike, Procter & Gamble, Unilever, Netflix y Disne”.
Sin embargo, al mismo tiempo en que Hoffman celebra tener la razón con estos datos, se atreve a dudar de los datos ofrecidos por el mismo, sugiriendo que pueden ser incluso peores.
“El informe citado proviene de la misma organización que hace tres años dijo que la ‘guerra contra el fraude publicitario está teniendo éxito’ y que ‘las medidas diseñadas para bloquear las impresiones fraudulentas están funcionando”», comenta.
Una crítica sobre los datos del fraude publicitario
“La falta de ideas de esta gente es realmente emocionante de contemplar. Cualquier que se tome en serio algo de lo que dicen está loco”, opinó el especialista, quien después brinda varios datos acerca de esta organización estadounidense. Así, apunta que, en 2019, la ANA aseguró «ridículamente» que el fraude publicitario había bajado a US$5.800 millones.
“En el informe de esta semana afirman que ‘se prevé que el fraude publicitario costará a los profesionales del marketing 81.000 millones de dólares en 2022’, pero el gráfico que elaboran muestra que costará 120.000 millones de dólares”, agrega.
Hacia el final del artículo, critica cómo la prensa gestiona el tema del fraude publicitario con las siguientes palabras:
“Se podría pensar que una historia de esta magnitud sería una noticia importante en la industria publicitaria, sobre todo cuando la principal organización del sector afirma que el fraude ha superado el inimaginable umbral de los US$100.000 millones”.
Asimismo catologó a la prensa especializada en publicidad y marketing como incompetente luego de llevar a cabo una búsqueda tanto en Adweek como en AdAge, sin ningún resultado.