Pese a la guerra y la inflación, la marca ha logrado más que sobrevivir, sus acciones aumentaron un 10% en lo que va de año gracias a su estrategia centrada en pasar los costes a sus clientes
Coca-Cola ha demostrado ser poseedor de una fórmula que no sólo cautiva el paladar de los consumidores, también le permite sobrevivir a épocas de crisis global como la actual.
En un artículo de The Wall Street Journal han tratado este tema señalando que, contra todo pronóstico, la compañía ha logrado más que sobrevivir, ha aumentado su valor de empresa.
Las acciones de Coca-Cola han subido un 10.2% en lo que va del año hasta el viernes pasado, en comparación con una caída del 10.4% en el S&P 500. Eso se compara con una ganancia de alrededor del 2% para el índice de consumo básico S&P 500.
Pero no se ha quedado ahí, las acciones de la empresa han subido alrededor de un 1% el lunes por la mañana, después de que la compañía publicara sólidos resultados en el primer trimestre, con ventas orgánicas, que eliminan nuestros movimientos de divisas y adquisiciones, que crecieron un 18% respecto al año anterior
La razón de este interesante comportamiento se encuentra en parte a los aumentos de precios, pero no del todo: el volumen de unidades de caja subyacente aumentó un 8%. Las ganancias por acción aumentaron un 23% respecto al año anterior, superando las estimaciones de los analistas.
De igual forma, la demanda de los consumidores ha demostrado, hasta ahora, estar blindada a los aumentos de precios. El director ejecutivo James Quincey aseguró que no espera que esto dure para siempre. “La inflación generalmente termina con presión en alguna parte”.
Sin embargo, agregó que la compañía preferiría errar y seguir aumentando los precios para traspasar los costos a sus consumidores, al menos por ahora. El hecho de que Coca-Cola haya podido hacer esto con éxito hasta ahora es testimonio de la fortaleza de sus marcas y logística global.
Los márgenes en el primer trimestre en realidad aumentaron, a un 31,4% ajustado desde el 31% del año anterior. Esto contrasta con las principales compañías de alimentos como Campbell Soup y Conagra Brands, que han tenido problemas para aumentar los precios lo suficientemente rápido como para mantenerse al día con la inflación.