La compañía Unilever explica cómo las olas de calor en Europa impactan en sus ventas de helados. El fabricante de Magnum y Cornetto refiere que el excesivo calor desanima a los consumidores del postre helado. ¿Por qué?
Si pensamos en el negocio de los helados, es fácil asociar la demanda por el producto al verano. Sin embargo, esta temporada del año está sufriendo alteraciones que la convierten en una amenaza para la industria del postre. En estos meses, se viven olas de calor extremos en Europa y Estados Unidos, con temperaturas por encima de los 40 grados centígrados. Uniliver, una de las compañías heladeras más gran del mundo, cuenta que esta intensidad perjudica sus ventas.
El director financiero de Unilever, Graeme Pitkethly declaró a la prensa que las olas de calor en Europa han impactado negativamente en sus ventas. “Cuando hace demasiado calor, la gente se aleja del helado y compra una bebida fría en su lugar”, explicó. De acuerdo con sus reportes, la empresa vio un gran repunte en sus ventas tras una ola de frío que dio paso a un clima cálido en junio.
No obstante, las altas temperaturas de las últimas semanas han acarreado malas consecuencias para el negocio. Como contexto, España e Italia han roto récord locales en cuanto a calor. Esto ha conllevado a que las autoridades de salud insten a los residentes y turistas a beber mucha agua y no salir de casa.

La incompatibilidad entre las olas de calor y la venta de helados
La sugerencia de priorizar las bebidas y mantenerse dentro de casa no ha sido la única limitación para las ventas de Unilever. La compañía compartió que los primeros seis meses del año vivió bajas ventas. Esto se debería a que los consumidores redujeron sus gastos por la inflación. De acuerdo con Euromonitor, la compañía controla la quinta parte de las ventas mundiales de helados.
Las ventas totales de helados de la empresa crecieron un 5,7 % en la primera mitad del año en términos de valor. Ello en comparación con el mismo período de 2022. Por otro lado, la compañía, que también fabrica el jabón Dove, dijo que los aumentos de precios se «moderarían» a lo largo del año a medida que disminuyera la inflación en los costos de sus insumos.
Sin embargo, el CEO Hein Schumacher advirtió que la volatilidad en los mercados de productos básicos y el impacto de la guerra de Ucrania podrían hacer subir los precios de los alimentos. Por otro lado, las acciones de la compañía subieron un 5%.
