La medida responde al aumento de operaciones con Yape y Plin en comercios informales y busca supervisar estos pagos para asegurar que los negocios cumplan con sus obligaciones tributarias.
La Sunat ha reforzado su vigilancia sobre los pagos que se realizan mediante billeteras digitales como Yape y Plin, especialmente en pequeños negocios informales. Estas plataformas, populares por su rapidez y practicidad, también permiten rastrear ingresos que no son declarados formalmente. La medida busca combatir la evasión tributaria en un entorno donde el uso del efectivo ha disminuido.
Aunque Yape y Plin han transformado los pagos en Perú, también han facilitado que muchos comerciantes eviten emitir boletas o facturas. Ahora, cualquier movimiento económico registrado en estas apps podrá ser usado por Sunat como indicio de ingresos no declarados. Si una persona percibe más de S/45.000 al año y no informa a la entidad tributaria, su cuenta podría ser intervenida.
La fiscalización incluye operaciones realizadas desde cuentas registradas con solo un DNI y número celular. “No habrá oportunidad de negar una operación bancaria, porque sí existe”, señaló el tributarista Fernando Zegarra. Sunat cotejará los ingresos recibidos con las declaraciones anuales de cada contribuyente, evaluando si corresponde el pago de impuestos o la apertura de procesos.
Además, cada transacción digital deja huella a través del Impuesto a las Transacciones Financieras (ITF), que representa el 0.005% del monto. Cuando este rastro se eleva abruptamente, los bancos deben informar a Sunat. La entidad puede entonces aplicar medidas como retenciones o embargos preventivos para garantizar el cumplimiento tributario.
Yape y Plin tienen límites diarios y mensuales que ayudan a identificar movimientos sospechosos. Mientras Yape permite recibir hasta S/26.750 mensuales y S/20.000 diarios, Plin establece cifras similares. Aunque son herramientas valiosas para pequeños negocios, el uso sin respaldo tributario puede derivar en fiscalización intensiva.