Mars, la cadena que elabora dulces como M&M’s y Skittles, cerró la compra de Pringles por 36 mil millones de dólares.
La industria de los alimentos continúa experimentando cambios. Los consumidores en todo el mundo se enfrentan a problemas de liquidez económica y demandan opciones más saludables. En ese contexto, el gigante de la confitería Mars llegó a un acuerdo para adquirir Kellanova, el fabricante de Pringles y Pop-Tart. La transacción se pactó por 36.000 millones de dólares. ¿Qué cambios se proyectan?
El negocio fue calificado como la mayor compra de snacks de este año. De acuerdo con la consultora de mercado Mintel, la industria se enfrenta a consumidores que optan por comida chatarra más barata y de marcas propias.
Por otro lado, Mars es una enorme cadena familiar. Entre las marcas que posee están Twix, Bounty, Milky Way, M&Ms y Skittles, y Kellanova. Además, tiene marcas como Pop-Tarts. Este acuerda eclipsa la adquisición de Wrigley por 23.000 millones de dólares por parte de Mars en 2008. Por eso, no se espera que enfrente demasiados obstáculos regulatorios, dijeron expertos legales a la agencia de noticias Reuters.

Mars ahora posee Pringles: ¿qué está sucediendo en la industria de los snacks?
De acuerdo con el Centro de Investigación de Economía y Negocios Globales (CIEN), para 2024 las ventas mundiales de confitería y snacks alcanzarían lo 1,770.0 mil millones de dólares. Por otro lado, se estima que los precios de alimentos y bebidas aumentaron cerca de un tercio entre septiembre de 2021 y septiembre de 2023.
Además, los gobiernos en todo el mundo están impulsando leyes destinadas a reducir el consumo de sustancias que motiven el aumento de precio. Por ejemplo, en Europa hay más incidencia en regular productos que afecten otros problemas de salud derivados del consumo de snacks con mucha grasa, sal y azúcar. En Perú, las advertencias mediante octógonos entraron en vigencia en 2019 oficialmente.