El esperado estreno del iPhone 17 no convenció a los inversionistas: las acciones de Apple cayeron 1.5% y la compañía perdió cerca de $50 mil millones en valor de mercado.
El 9 de septiembre Apple presentó su nueva serie iPhone 17 en el evento “Awe-Dropping” y aunque los seguidores de la marca celebraron las novedades, en Wall Street la reacción fue distinta: el precio de la acción cerró en $234.35, marcando una baja de 1.5%.
Tras ello, los analistas señalan tres razones principales. Primero, la mayoría de funciones ya se habían filtrado antes, por lo que el evento no tuvo grandes sorpresas. Segundo, Apple asumió más de $1,000 millones en costos de aranceles en EE.UU. sin aumentar precios, lo que generó dudas entre inversionistas sobre la rentabilidad de la compañía. Y tercero, la compañía no presentó una estrategia clara en inteligencia artificial, el tema más esperado en la industria tecnológica.
Anteriormente, esto ya ha ocurrido en otros lanzamientos del iPhone, pero las acciones suelen bajar en el corto plazo para luego recuperarse. Incluso con el primer modelo, en 2007, la subida grande llegó semanas después del evento.
Los inversionistas, de cualquier modo, estarán atentos a si Apple logra mantener su dominio en los celulares de alta gama, cómo sigue creciendo su negocio de servicios como iCloud y Apple Music, y cuándo presentará un avance real en inteligencia artificial.
También, el reto está en recuperar la demanda en mercados clave como China e India, ya que si lo consigue, esta caída podría ser solo un tropiezo pasajero para una de las marcas más valiosas del mundo.
Aún así, según Counterpoint Research, en el primer trimestre de 2025 Apple alcanzó el 19% de los envíos globales de smartphones, superando momentáneamente a Samsung en participación de mercado, lo que hace muy posible que la compañía se recupere.