El subgerente de Transformación y Cultura de Los Andes, Fernando Bulnes, plantea 5 puntos para reconocer esta afección y prevenir que se agrave.
El síndrome de agotamiento laboral también conocido como ‘burnout’ es un problema creciente en el entorno laboral moderno. Este estado de estrés crónico repercute de forma negativa en la productividad, el bienestar emocional de los colaboradores e incluso puede provocar una desconexión emocional con el trabajo. Detectarlo de forma temprana es esencial para que los líderes puedan tomar acciones y evitar un impacto negativo en sus equipos.
Fernando Bulnes, Subgerente de Transformación y Cultura de Los Andes, aclara sobre la importancia de identificar los primeros signos: «El burnout no solo se manifiesta en el agotamiento físico, sino también en la falta de motivación y en actitudes negativas. Es crucial que los líderes estén atentos a estos síntomas para prevenir que el problema se agrave.»
Claves para identificar el burnout en el equipo de trabajo:
Cansancio físico y mental constante: Los colaboradores que sufren burnout suelen mostrar fatiga persistente, incluso después de periodos de descanso. Esta falta de energía puede afectar su capacidad para cumplir con las tareas diarias.

Desinterés y falta de motivación: La desconexión emocional con el trabajo es una señal clave. Los empleados comienzan a mostrar poco interés en las actividades que antes disfrutaban, y su motivación para alcanzar metas o involucrarse en proyectos disminuye notablemente.

Irritabilidad o cambios de humor: El estrés crónico puede manifestarse en irritabilidad, frustración o un cambio general en la actitud. Los colaboradores pueden volverse más sensibles y reaccionar de manera negativa ante situaciones que antes manejaban con facilidad.

Baja productividad: El burnout afecta directamente el rendimiento. A pesar de los esfuerzos, los colaboradores pueden notar que su productividad disminuye, ya sea porque no logran concentrarse o porque no tienen la energía suficiente para completar sus tareas.

Aislamiento y distanciamiento emocional: Los trabajadores afectados por burnout pueden aislarse del equipo, evitando participar en reuniones o colaboraciones. También pueden mostrar una actitud más fría y distante hacia sus compañeros y responsabilidades.

Bulnes sugiere a los líderes fomentar una cultura laboral que priorice el bienestar de los colaboradores. «Es fundamental ofrecer espacios para el diálogo, implementar pausas activas y revisar la carga de trabajo para asegurarse de que sea equilibrada. Además, se deben ofrecer oportunidades para el crecimiento personal y profesional, y así evitar que los colaboradores sientan que están estancados.»