En un esfuerzo por promover entornos laborales seguros, GenderLab ha desarrollado una innovadora solución para reducir los casos de acoso sexual, utilizando big data e inteligencia artificial.
En un esfuerzo por promover entornos laborales seguros y libres de acoso sexual, la startup peruana GenderLab ha desarrollado una herramienta digital de diagnóstico llamada ELSA, una innovadora solución que está revolucionando la forma en que las empresas de Hispanoamérica abordan este problema persistente.
Utilizando la tecnología de Big Data e inteligencia artificial para medir (a través de encuestas anónimas), monitorear y tomar medidas efectivas (según la estrategia sugerida en base a la data de las encuestas) contra el acoso sexual laboral, la startup ha logrado quintuplicar la cantidad de clientes en los últimos cinco meses, logrando así reforzar su presencia en los siete países donde operan.
De acuerdo con la CEO la firma, Marlene Moreno, el objetivo que tienen como organización es proporcionar a las empresas las herramientas necesarias para detectar, prevenir y abordar el acoso sexual de manera eficiente y efectiva.
Asimismo, agregó que nueve de cada diez personas no saben bien lo que es el acoso sexual, pues solo asocian este término a cuando existe contacto físico o se ha dado una agresión fuerte.
“Esto es un problema que, además le cuesta a las organizaciones: una de cada cuatro personas que pasan por esto falta al trabajo, pide que la cambien de área con cualquier excusa, y finalmente termina renunciando. El resto, que ve lo que pasa, disminuye sus niveles de satisfacción laboral. Entonces, esto le cuesta todos los días plata a las organizaciones y les resta productividad. Los hace tener que incurrir en costos de buscar y entrenar nuevo talento en momentos en el que las organizaciones hacen tanto esfuerzo para incorporar a las mujeres en la fuerza laboral”, señaló Marlene Moreno.
Actualmente, más de 120 compañías y más de 100,000 personas han llegado a utilizar esta herramienta en Hispanoamérica. En su mayoría, son empresas medianas o grandes, que cuentan con una gran masa de trabajadores.
“Hasta a abril, tenemos más de 50 organizaciones (activas) usando ELSA. Esa cifra la hemos quintuplicado desde diciembre, y lo mismo ha pasado con el ARR, que son nuestros ingresos recurrentes”, agregó Molero.
El combate contra el acoso sexual en el ámbito laboral es un desafío persistente, pero esta startup peruana demuestra que la innovación y la tecnología pueden desempeñar un papel fundamental en la prevención y erradicación de este problema. Su enfoque integral y compromiso con el cambio están marcando la diferencia en las empresas de Hispanoamérica, creando un futuro laboral más seguro y respetuoso para todos.
Fuente: Forbes Perú