The Friend of Pablo: La reinvención va por dentro No era la primera vez que Miguel Saavedra fantaseaba con abandonar su profesión y comenzar a “vender lo que quisiera”. Pero esa noche en el París del 2014, la idea lo sacudió con un nombre y un proyecto, y desde entonces la ciudad del amor dejó de ser el destino de una prometedora carrera, para convertirse en el primer capítulo de The Friend of Pablo. Escuchó muchos “no” antes de cristalizar su visión y en ocasiones, le intimidaba la idea de interrumpir casi una década de trabajo en el rubro del consumo masivo. Por eso, decidió dejar salir a Pablo, su alter ego, un osado aventurero parisino, que tomó el protagonismo de este viaje, y que renunció oficialmente a la vida en oficina en septiembre del 2019, luego de dejar madurar el plan por cinco años, y construir sus posteriores capítulos en Perú y Chile. El mismo año abrió su tienda en Jockey Plaza como curador de accesorios decorativos, para luego enfocarse en lentes como un accesorio de moda. Hoy, ya representa un nuevo concepto de óptica en Perú, ofreciendo lentes de sol y monturas de filtro azul (con o sin medida) desde sus dos puntos de venta, donde también cuenta con un servicio de prueba de gafas en casa. “Tuvimos la suerte de tener una sólida base en redes sociales y pudimos afrontar la primera cuarentena de la pandemia del 2020. Muchas de nuestras ganancias del año pasado las donamos y con el resto construimos las dos tiendas que tenemos actualmente”, compartió el emprendedor. Propósito: ser la óptica más cercana y amigable del país. Estrategia: precio aprox 30% menor a una óptica regular, basado en montura + lunas con medida. Facturación anual del negocio: S/ 2,4 millones (venta proyectada para el 2021). Número de empleados: nueve. Países en los que tiene presencia: Perú.