De esta forma, la compañía de dentífrico pretende dar un valor agregado a sus consumidores y promoviendo el ahorra de dinero.
Colgate ha decidido dar un valor agregado a sus dentífricos incorporando en ellos una tecnología antifricción, la cual permite que el contenido se deslice por el empaque de manera sencilla. El nombre de este sistema es LiquiGlide y se hizo famoso en 2012, momento en el que se viralizó el video de un bote de ketchup, mayonesa y mostaza cuyo contenido se deslizó sin ningún tipo de impedimento, permitiendo aprovecharlo al máximo.
El LiquiGlide fue inventado por Dave Smith y Kripa Varanasi, profesionales de la educación en el MIT. Esta tecnología pretende hacer frente a una problemática de larga data sobre los contenidos que se pegan a las superficies sólidas, “ya que estos crean enormes ineficiencias en todos los sectores”, explican desde su plataforma web.
Así mismo, el nuevo empaque de pasta de dientes desarrollado por la marca de cuidado dental cuenta con características transformable, transparente, de PET y reciclable aunque, hasta el momento, tan solo se encuentra disponible en la gama de Colgate Elixir.
Los desarrolladores de LiquiGlide han explicado el éxito de este sistema asegurando que se encuentra en su fórmula, en el que aplican un patrón texturizado a la superficie, aunado a esto se añade un líquido con una composición química personalizada que rellena los espacios sin rellenar entre las texturas, lo cual crea una fina capa resbaladiza.
De acuerdo con este sistema, la pasta de dientes no tiene contacto con el bote, puesto que en medio se encuentra la capa resbaladiza conocida como “superficie hidrofóbica”. Asimismo, otra de las ventajas de esta tecnología es que puede aplicarse tanto a materiales comestibles, como industriales, asegurando un largo recorrido a su fabricante.