Todavía recuerdo mi primer encuentro con el Rugby en vivo y en directo. Era el año 2001 y cubríamos un partido de los “Tumis” frente a Colombia en el Colegio Markham para el programa “Tiempo Record”. Un centenar de personas alentaba sin cesar a los muchachos que en un partidazo, terminaron derrotando a los colombianos. Pasó el tiempo y la relación con el Rugby se mantuvo: Reportajes, entrenamientos (solo un par), animación en Wallace, festejos en el “tercer tiempo” y hasta un programa piloto de televisión.
En el 2015, nuevamente fuimos a ver a los Tumis, esta vez al Colegio Newton. Ya no eran 100 personas. El lugar estaba abarrotado, incluso con transmisión en vivo a través de la señal abierta. Una muestra del crecimiento de una disciplina que – para muchos – puede parecer rudo pero que, sin embargo, es un deporte de caballeros que encierra muchísimos valores como la disciplina, el respeto, la integridad, la pasión y la solidaridad.
Pero el tema de este artículo va por el interés que, poco a poco, viene despertando en el mercado peruano. Si una Federación quiere tener resultados, primero debe ordenarse internamente y una de las prioridades es institucionalizar a los clubes. Si bien es cierto aún falta lograr ese ordenamiento, algo se ha podido avanzar y así se han podido establecer relaciones comerciales con algunas marcas.
“Este trabajo nos ha permitido incrementar nuestro presupuesto considerablemente. El punto aquí es demostrar, a través de una propuesta profesional y sólida, el potencial comercial que tiene nuestro deporte para las empresas, destacando nuestros valores y beneficios y cómo se pueden alinear a sus valores corporativos”, nos cuenta Maser Madueño, actual presidente de la Federación Peruana de Rugby, quien lleva muchos años ligado a esta disciplina primero como jugador y ahora como dirigente.
Toda acción se hace en base a una inversión y a una planificación. Para todo ello se necesitan recursos – que en muchos casos, no se tienen – y es aquí donde las acciones de marketing deben cumplir su función para generarlos. Siendo un deporte poco popular, la estrategia debe ser eficiente y debe comunicarse eficientemente, teniendo como aliado a los medios e incluso a las redes sociales.
El tener presencia en medios es importante para saber que el deporte existe y un adecuado manejo de las redes sociales, también. La “bulla” que genere los torneos y las diversas acciones son las que van a despertar el interés de las marcas en tener presencia. Actualmente, el rugby cuenta con el apoyo de Pilsen, Bodytech, VO2, Gatorade, Nutripoint y Tiffosi.
Si bien es cierto, el apoyo existe, el crecimiento debe continuar, sobre todo si de formación (a nivel de profesores) y de organización se trata. Hace unos días, se firmaron convenios importantes para el crecimiento de este deporte. Uno de ellos con la Unión Argentina de Rugby, la cual apoyará la gestión institucional.
Y el otro convenio, que tiene que ver con desarrollo y masificación, es el que se firmó con LAMSAC, que les permitirá conseguir recursos para contratar un mayor número de profesores.